Álvaro Ratón, ex portero del Real Zaragoza, ha sido absuelto por tercera vez (y definitivamente) de la denuncia por agresión sexual presentada por una mujer en 2018. Los supuestos hechos ocurrieron en la noche de San Juan en el pueblo de O Carballiño, en Ourense, cuando jugaba de portero para el equipo aragonés.
Ahora, como portero del equipo griego Pas Lamia, Ratón ha hablado en televisión sobre esta tercera absolución, y ha dicho que tomará medidas contra la denunciante.
El portero ha pasado seis años de “sufrimiento” durante los cuales no ha podido viajar a su pueblo ni a las casas de sus familiares, debido a la orden de alejamiento en su contra, a causa de los “falsos testimonios” que sufrió durante el juicio.
“Me han absuelto en 3 ocasiones y estoy contento porque se ha hecho justicia, pero no he podido disfrutar de visitas familiares y celebraciones por algo que no hice. Ahora que se ha demostrado y se han mostrado como falsas las acusaciones, tengo que defenderme”, dijo Álvaro en el programa de Telecinco ‘Vamos a ver’.
Durante la entrevista, Ratón dijo que las mujeres deben ser “apoyadas”, pero que esto no debe hacerse “a cualquier precio”. “No había más que su palabra y enseguida me convertí en un monstruo”.
Anunció que ahora emprenderá acciones legales contra la mujer que lo acusó y sus testigos. “Esto no puede quedar así. De cierta manera, tiene mucho sentido. La gente solo quiere que todo se solucione y vuelva a la normalidad cuando han sido absueltos, porque llega un momento en el que no quieres seguir, pero por otro lado tienes que defender lo que es tuyo y lo que es correcto. No solo contra esta persona, sino también contra los falsos testimonios que se han hecho en mi contra en los juicios”, concluyó.
En 2018, una mujer denunció que el futbolista se le acercó con intenciones íntimas y, tras negarse ella, no aceptó su negativa, la empujó, intentó besarla y la sometió a tocamientos. Solicitaba cuatro años de prisión para el futbolista, 10.000 euros en compensación y una orden de alejamiento de 500 metros. Sin embargo, los tribunales han fallado a favor de la defensa en tres ocasiones, siendo esta decisión final la que pone fin a su calvario.