A medida que se acerca la Convención Nacional Demócrata, algunos demócratas siguen preocupados por una posible falta de apoyo de los votantes “no comprometidos”, que están enojados por el respaldo de Estados Unidos a la ofensiva de Israel en Gaza.
No está claro cuánta influencia tiene el movimiento de los “no comprometidos” tras el aumento del entusiasmo por la campaña de Harris en comparación con la de Biden, lo que hace que la apatía de los votantes sea una amenaza menor. No obstante, Harris y su equipo han priorizado la comunicación con los líderes árabes estadounidenses.
La campaña de Trump continúa su propio acercamiento a los árabes estadounidenses con un discurso que destaca la situación en Gaza bajo la administración de Biden y una promesa del equipo de Trump de darle a la comunidad un lugar en la mesa si gana.
De los miles de delegados que se espera que se reúnan el lunes en la Convención Nacional Demócrata, solo 36 pertenecerán al movimiento “no comprometido” provocado por el descontento con el manejo del presidente Joe Biden de la guerra entre Israel y Hamás.
Pero ese pequeño núcleo tiene una influencia descomunal.
La ira por el respaldo de Estados Unidos a la ofensiva de Israel en Gaza podría generar imágenes no deseadas para los organizadores de la convención, con protestas estridentes esperadas afuera y potencialmente dentro del estadio de Chicago donde Harris aceptará la nominación el jueves.
Los principales demócratas han pasado semanas reuniéndose con votantes “no comprometidos” y sus aliados (incluida una reunión no reportada previamente entre la vicepresidenta Kamala Harris y el alcalde de Dearborn, Michigan) en un esfuerzo por responder a las críticas en estados clave como Michigan, que tiene una importante población árabe estadounidense.
Meses de reuniones y llamadas telefónicas entre activistas pro palestinos y la campaña de Harris han caído en un impasse. Los activistas quieren que Harris apoye un embargo de armas a Israel y un alto el fuego permanente. Harris ha apoyado las negociaciones de Biden para un alto el fuego, pero ha rechazado un embargo de armas.
Rima Mohammad, una de los dos delegados “no comprometidos” de Michigan, dijo que ve la convención como una oportunidad para compartir las preocupaciones de su movimiento con el liderazgo del partido.
“Es una manera para que los manifestantes que están afuera puedan compartir su frustración con el partido”, dijo.
Abbas Alawieh, delegado no comprometido a la Convención Nacional Demócrata, responde preguntas durante una entrevista el 14 de agosto de 2024, en Dearborn, Michigan. (Foto AP/José Juárez)
El candidato demócrata se reúne con un importante alcalde árabe-estadounidense
Aún quedan dudas sobre la influencia que tienen los votantes “no comprometidos” ahora que Biden se hizo a un lado y Harris ocupó su lugar. Los demócratas han visto un aumento significativo en el entusiasmo por la campaña de Harris y las preocupaciones sobre la apatía de los votantes en áreas clave, como la gran población negra de Detroit, parecen haber disminuido.
Pero Harris y su equipo todavía han hecho de la comunicación con los líderes árabes estadounidenses una prioridad.
Durante un viaje de campaña a Michigan la semana pasada, Harris se reunió con Abdullah Hammoud, el alcalde de 34 años de Dearborn, un suburbio de Detroit que tiene la mayor cantidad de estadounidenses árabes de cualquier ciudad de Estados Unidos. La reunión fue revelada por una persona que no estaba autorizada a hablar sobre ella públicamente y habló bajo condición de anonimato.
La persona familiarizada con la reunión no proporcionó detalles específicos, pero dijo que el foco estaba en la posible política de Harris, si es elegida, respecto del conflicto entre Israel y Hamás. Hammoud se negó a hacer comentarios.
“La vicepresidenta Harris apoya los acuerdos que están sobre la mesa para un alto el fuego permanente en Gaza y la liberación de los rehenes”, afirmó su campaña en un comunicado. “Seguirá reuniéndose con líderes de las comunidades palestina, musulmana, israelí y judía, como lo ha hecho durante toda su vicepresidencia”.
La directora de campaña, Julie Chávez Rodríguez, mantuvo el jueves reuniones individuales por separado con líderes de la comunidad árabe estadounidense y del movimiento “no comprometido” en el área metropolitana de Detroit.
“Están escuchando y nosotros estamos hablando”, dijo Osama Siblani, editor de The Arab American News, quien se reunió con Chávez Rodríguez. “Pero ninguno de nosotros puede conseguir votos en la comunidad sin declaraciones públicas de Harris. Ella no nos necesita; puede ganar votos diciendo y haciendo lo correcto”.
Según Siblani, Chávez Rodríguez estuvo de acuerdo en que “hay que parar la matanza”. En respuesta, Siblani dijo que insistió: “¿Cómo? No hay ningún plan”.
Lavora Barnes, presidenta del Partido Demócrata en Michigan, dijo que el partido “seguirá trabajando hacia nuestro objetivo de unirnos para derrotar a Donald Trump y a los republicanos en todas las elecciones”.
“Estamos comprometidos a continuar estas conversaciones con líderes comunitarios, activistas y organizaciones porque queremos asegurarnos de que todos en el Partido Demócrata de Michigan tengan un lugar en la mesa”, dijo Barnes en un comunicado.
No hay acuerdo sobre el embargo de armas
Algunos miembros de la izquierda del Partido Demócrata han pedido que se incluya una moratoria al uso de armas de fabricación estadounidense por parte de Israel en la plataforma de objetivos políticos que se aprobará durante la convención de la próxima semana. Pero ese lenguaje no está incluido en un borrador de plataforma que los funcionarios del partido publicaron a principios de este verano, y es poco probable que quienes están cerca de la campaña de Harris apoyen su inclusión.
El Movimiento Nacional No Comprometido también ha solicitado un espacio para hablar en la convención para un médico que haya trabajado en el frente de batalla en Gaza, junto con un líder del movimiento. Y han pedido una reunión con Harris “para discutir la actualización de la política sobre Gaza con la esperanza de detener el flujo de armas y bombas incondicionales” a Israel, dijo Abbas Alawieh, otro delegado “no comprometido” de Michigan y uno de los fundadores del movimiento.
Antes de un mitin de Harris en las afueras de Detroit la semana pasada, Alawieh y Layla Elabed, cofundadoras del movimiento, se reunieron brevemente con la vicepresidenta. Solicitaron una reunión formal con Harris y la instaron a apoyar un embargo sobre los envíos de armas a Israel. Según ellos, Harris parecía abierta a la idea de reunirse.
Sin embargo, poco después de que se hiciera pública la noticia de la reunión, el asesor de seguridad nacional de Harris, Phil Gordon, reafirmó que ella no apoya un embargo de armas. Alawieh mencionó el miércoles que el grupo no ha recibido ninguna respuesta adicional del equipo de Harris ni del DNC con respecto a sus solicitudes antes de la convención.
“Espero que no pierda la oportunidad de unir al partido”, dijo Alawieh.
La campaña de Trump continúa su difusión
En otra parte del área metropolitana de Detroit esta semana, Massad Boulos, el suegro de la hija menor de Trump y ahora líder de su campaña de divulgación entre los árabes estadounidenses, estaba celebrando reuniones con varios grupos comunitarios. Boulos ha venido a Michigan con frecuencia para la campaña, junto con el presidente de Arab Americans for Trump, Bishara Bahbah.
Según Bahbah, su discurso destaca la situación en Gaza bajo la administración de Biden y una promesa del equipo de Trump de darle a la comunidad un lugar en la mesa si gana.
“El círculo de Trump, que no forma parte de la campaña, nos ha dicho que a cambio de nuestros votos obtendremos un lugar en la mesa y se escuchará nuestra voz”, afirmó Bahbah.
Pero cualquier oportunidad política aparente para Trump en la comunidad árabe estadounidense o en el movimiento “no comprometido” puede verse limitada por sus comentarios y políticas pasadas.
Muchos árabes siguen ofendidos por la prohibición que Trump, durante su mandato, ha impuesto a la inmigración procedente de varios países de mayoría musulmana, así como por comentarios que consideran insultantes. Trump también ha criticado a Biden por no ser un defensor lo suficientemente firme de Israel.
Dirigiéndose a una audiencia de partidarios judíos el jueves, Trump calificó a los manifestantes esperados en Chicago como antisemitas e invocó un término árabe que a veces usan los musulmanes para significar guerra o lucha.
“No habrá yihad en Estados Unidos bajo el gobierno de Trump”, afirmó.
Pero Bahbah reconoce que su estrategia y la de Boulos no apuntan necesariamente a convertir a los votantes para que apoyen a Trump, sino a evitar que voten por Harris.
“Si no puedo convencer a la gente de votar por Trump, es mejor dejarlos en casa”, dijo Bahbah.