Las asociaciones de agencias inmobiliarias en la Costa Blanca han criticado una propuesta del primer ministro Pedro Sánchez de introducir un impuesto estilo impuesto de timbre del 100% sobre las compras de propiedades realizadas por ciudadanos no pertenecientes a la UE.
La provincia de Alicante representa más del 20% de las compras de propiedades internacionales en España, con temores de que las empresas se vean arruinadas.
Las asociaciones afirman que miles de ventas de propiedades están amenazadas y que la propuesta ya ha causado una gran incertidumbre entre los compradores de países como el Reino Unido.
El anuncio del impuesto de Sánchez también amenaza a posibles clientes de países como Noruega y Ucrania.
La Asociación Provincial de Promotores de Alicante (Provia), el Colegio de Agentes Inmobiliarios y la asociación de agencias inmobiliarias Asicval describieron el nuevo plan de impuestos como un ‘absoluto disparate’.
Miguel Galindo de Asicval en Alicante dijo que los compradores ansiosos que han reservado propiedades sobre plano ya están ‘inundando a los agentes’ con preguntas sobre el impacto potencial en sus bolsillos y si pueden retractarse de las compras.
La falta de claridad por parte del gobierno también ha dejado a las agencias inmobiliarias incapaces de proporcionar respuestas definitivas.
El gobierno aún no ha proporcionado detalles y no se sabe si el impuesto del 100% afectará a todos los compradores no pertenecientes a la UE por igual, como un inversor de Dubái o un ciudadano británico buscando una casa de retiro o vacaciones.
No se han mencionado plazos para el inicio del impuesto ni si algunos países, especialmente en Europa, podrían estar exentos.
Las posibles consecuencias de un impuesto se pueden ver claramente en la provincia de Alicante, donde en las últimas cifras de 2023, 30,072 compradores extranjeros adquirieron propiedades, lo que representó el 20.43% de todas las transacciones extranjeras en España, generando más de €5.6 mil millones en ingresos.
En cuanto a países no pertenecientes a la UE, los compradores del Reino Unido encabezaron la lista con 3,942 compras, seguidos de ucranianos (1,400), rusos (1,291), marroquíes (851), noruegos (762), argelinos (702), suizos (317) y chinos (236).
Esos grupos representaron más de un tercio de las transacciones extranjeras en la provincia de Alicante y aunque las cifras no distinguen entre residentes de la UE y no residentes, el sector inmobiliario estima que miles de acuerdos podrían verse afectados cada año, quizás más de 5,500 hogares.
Jesualdo Ros, secretario general de Provia, expresó una profunda preocupación por las posibles consecuencias.
Dijo que años de esfuerzos, como atraer inversores estadounidenses a la Costa Blanca, podrían deshacerse.
Ros también enfatizó que las viviendas dirigidas a compradores no pertenecientes a la UE, a menudo propiedades frente a la playa, no se superponen con los tipos de viviendas buscadas por parejas jóvenes o familias locales.
Cuestionó la lógica detrás de una política que no aborda los problemas de asequibilidad de la vivienda en España pero que corre el riesgo de alienar un segmento crucial del mercado.
Marife Esteso, presidenta del Colegio de API de Alicante, compartió estas preocupaciones, destacando la importancia económica del turismo residencial.
Señaló que los compradores extranjeros no solo invierten en propiedades, sino que también inyectan dinero en negocios y servicios locales durante sus estancias.
Esteso desestimó la propuesta de Sánchez como ineficaz, sugiriendo en su lugar que el gobierno se centre en aumentar la disponibilidad de terrenos y proporcionar garantías legales para los propietarios de alquiler para abordar la escasez de viviendas.
Miguel Galindo de Asicval dice que los posibles clientes británicos, alarmados por el anuncio de Sánchez, están buscando garantías.
Indicó que incluso la sugerencia de un impuesto del 100% a los no pertenecientes a la UE ya ha afectado la confianza de los compradores, lo que podría tener repercusiones duraderas para la economía de la región.