Los seguidores del líder de la oposición de Mozambique, Venâncio Mondlane, resultaron heridos cuando la policía intentó dispersar a la multitud que había ido a recibirlo después de su regreso del exilio autoimpuesto el jueves. Había abandonado el país diciendo que pensaba que su vida corría peligro tras la disputada elección presidencial de octubre que desencadenó protestas mortales. Mondlane aterrizó en el principal aeropuerto de la capital, Maputo, en medio de tensión y fuerte seguridad, con miles de personas reunidas para darle la bienvenida. Su regreso se produjo antes de la toma de posesión de Daniel Chapo como presidente la próxima semana. Frelimo ha estado en el poder durante las últimas cinco décadas desde la independencia de Portugal. Después de salir del edificio del aeropuerto, un video muestra a Mondlane arrodillado en el suelo con una Biblia en la mano siendo aclamado por sus seguidores. El predicador pentecostal de 50 años comenzó a rezar y luego dijo que había ganado las elecciones. “Yo, Venancio Mondlane, presidente electo por el pueblo mozambiqueño… elegido por la genuina voluntad del pueblo – juro por mi honor servir a la patria mozambiqueña y su gente”, declaró. Dijo que regresaba para estar más cerca del movimiento de protesta que ha visto semanas de manifestaciones en todo el país en las que han muerto docenas de personas. El jueves, tres personas resultaron heridas de bala en uno de los mercados de la capital después de una breve manifestación celebrada por Mondlane, dijo el portavoz de la policía, Orlando Mudumane. Testigos dijeron que mientras la policía intentaba dispersar a la multitud se produjeron disparos. Los heridos fueron trasladados al hospital. Hay otros informes no confirmados de víctimas mortales. El portavoz de la policía también dijo a los periodistas que dos agentes fuera de servicio habían sido atacados y asesinados en otra provincia – Nampula. En sus primeros comentarios a su llegada al país, Mondlane dijo que estaba dispuesto a hablar sobre cómo resolver la tensión por la elección disputada, la cual afirma que le fue robada. “Estoy aquí en carne y hueso para decir que si quieren negociar… estoy aquí”, dijo. Añadió que había regresado para denunciar las “atrocidades” que dijo se estaban cometiendo contra sus seguidores y para defenderse de las acusaciones de responsabilidad penal. También dijo que “seguirá luchando por este país y evitando la continuación de la situación actual”. Mondlane ha estado organizando protestas a través de transmisiones en Facebook, pero durante el fin de semana anunció su inminente regreso, diciendo que “ya no necesitan perseguirme”. En un mensaje desafiante dijo: “Si [las autoridades] quieren pueden matarme, pero la lucha continuará”. Antes de su llegada, el aeropuerto estaba fuertemente custodiado con agentes de policía tratando de evitar que los seguidores de Mondlane llegaran al área. Mondlane dijo que su regreso fue “una decisión unilateral” que no surgió de ningún acuerdo político. Anteriormente había dicho que se instalaría como presidente el 15 de enero. Desde las elecciones de octubre, olas de protestas han dejado más de 270 personas, incluidos manifestantes, niños y miembros de las fuerzas de seguridad, muertos, según grupos de derechos humanos. Las protestas y la violenta represión de las fuerzas de seguridad han puesto a prueba la estabilidad del país y ha habido preocupaciones de que empeore si algo le sucede a Mondlane.