Los agricultores se manifestaron en Madrid el lunes en contra de las importaciones baratas que inundan España después de un reciente acuerdo arancelario entre la Unión Europea y cinco países latinoamericanos.
Temen que el acuerdo afecte no solo a ellos, sino también a sus colegas en toda la UE.
La manifestación fue organizada por los sindicatos Asaja y COAG, con agricultores reuniéndose frente al edificio del Ministerio de Agricultura en la capital española.
El acuerdo de la UE se concluyó con los miembros del Mercosur (Argentina, Brasil, Uruguay, Paraguay y Bolivia) el 6 de diciembre.
Se ha descrito como un acuerdo “innovador” para aumentar el comercio e inversión bilateral y reducir las barreras arancelarias y no arancelarias, especialmente para las pequeñas y medianas empresas como las granjas.
Los sindicatos han expresado su preocupación de que el acuerdo cree una desigualdad de oportunidades en el sector agrícola de España.
Dicen que los costos de producción en los países del Mercosur son mucho menores que en España, y la importación de los productos podría tener un impacto significativo tanto en los agricultores españoles como en los europeos.
El acuerdo resultará en pérdidas “irreparables” en España y el cierre de negocios, afirman los sindicatos.
Jordi Vidal, productor de carne y portavoz de Jóvenes Agricultores y Agricultores de Cataluña, dijo: “Nos han vendido y nos han atado las manos”.
Vidal cree que nadie va a verificar o garantizar si la carne de los países del Mercosur está tratada con productos prohibidos dentro de la UE.
También pidió “aranceles ambientales” para “cumplir con los estándares”.
El agricultor de Málaga, Santiago Sánchez, comentó: “Mercosur nos está llevando a las calles, porque serán una competencia desleal”.
Pidió un campo de juego nivelado con reglas aplicadas en España y la UE impuestas en otros países.