Es bastante el documento, este nuevo especial de Jamie Foxx, en el que el ganador del Oscar y del Grammy se abre sobre la “enfermedad misteriosa” que casi lo mata. Se podría ver como el himno de Dios del hombre de 56 años, a sus fans (y a sí mismo, francamente) mientras, temblando de labio, expresa gratitud por esta segunda oportunidad en la vida. O como el ego devorador de Hollywood hecho manifiesto en stand-up y canción. O como un estudio de caso en las confusiones de la masculinidad moderna. De cualquier manera, ciertamente deja una impresión.
Lo que hace que el espectáculo (con un título poco elegante de “What Had Happened Was…”) sea noticiable es su relato del derrame cerebral que Foxx tuvo en abril de 2023, que lo sacó de la vida pública y provocó rumores de que había muerto. En el relato de Foxx, fue una muerte, en cierto modo. Usando una silla de ruedas, incapaz de limpiarse el trasero, Foxx tuvo que matar al antiguo Jamie egocéntrico para que uno más humilde pudiera sanar y seguir adelante. Así fueron las enseñanzas de una enfermera de Chicago sin rodeos que guió al superastro hacia la recuperación, con la ayuda de su hermana, sus hijas, las oraciones de sus fans, y el Señor y Salvador que también orquestó todo esto.
El derrame cerebral, aprendemos, fue un castigo divino por la mala asistencia de Foxx a la iglesia. Afortunadamente, Jamie ahora se arrepiente de sus pecados de tal manera que este set se transforma en un servicio espiritual al final, su anfitrión llevando a su rebaño en un cántico piadoso. Antes de eso, hay primeros planos largos y prolongados de él rompiendo en lágrimas (“Por favor, Señor, déjame superar esto”) y stand-up fanfarrón sobre cómo “Jamie maldito Foxx… no necesita terapeutas”. A veces, los cambios bruscos entre las muchas caras del machismo moderno son mareantes, mientras nuestro anfitrión pasa de sollozar en el escenario con su hija de 14 años a hacer chistes sobre no tener relaciones sexuales con “chicas blancas”.
Lo que es evidente, finalmente, es que Foxx ha sido sacudido por su experiencia, y que sigue siendo un artista extraordinario, ya sea como pianista, cantante, imitador (con grandes imitaciones de Trump, Denzel Washington, Jay-Z y más) o narrador. Puede ser exagerado y religioso, pero este relato de las fauces de la muerte es sincero y difícil de apartar la mirada.
Jamie Foxx: What Had Happened Was… está en Netflix