Islas Baleares, una región con el mayor aumento

Jorge Fe es el gerente de Fuera Okupas, una empresa con presencia a nivel nacional que comenzó a operar en las Islas Baleares en 2022. La empresa actúa como intermediaria para convencer a los okupas de abandonar las propiedades. “En el 99% de los casos tenemos éxito”.

Fe señala que las Islas Baleares son una de las regiones de España donde más ha aumentado la ocupación ilegal. En el último trimestre de 2023, destaca, hubo un aumento del 11%. Palma y la Ciudad de Ibiza son las más afectadas, especialmente los barrios de clase media y trabajadora, así como las zonas turísticas. “Las áreas más ricas tienen menos okupas porque no hay propiedades vacías”.

Él tiene claro por qué la ocupación ilegal ha estado “en auge”. “Se debe a la ley de vivienda y la declaración de persona vulnerable que impide el desahucio”.

Los inquilinos son considerados vulnerables si han perdido sus trabajos o han experimentado una disminución sustancial de ingresos de al menos el 40%. La vulnerabilidad también se establece si el ingreso total de la unidad familiar no supera los umbrales establecidos por la ley. Fe explica que los inquilinos-okupas son el mayor desafío para su empresa.

Hay diferentes tipos de okupa. “Algunos actúan como si la propiedad fuera suya. La reparan, la pintan; incluso me he encontrado con instalaciones de fibra óptica solicitadas por ellos”. Luego están aquellos que alquilan habitaciones. Otros las utilizan como pisos de drogas o para la prostitución.

Las mafias, dice Fe, ocupan propiedades para venderlas. “Por 4,500 euros venden una propiedad. Como el proceso de desahucio puede durar alrededor de dos años y medio, es rentable para el comprador. En Palma, no se puede alquilar por menos de 950 euros al mes. Eso significaría un gasto promedio de alrededor de 30,000 euros durante el tiempo que lleva recuperar la vivienda. En cambio, el okupa ha podido vivir en la propiedad por 4,500 euros”.

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Las agencias inmobiliarias proporcionan información a los posibles okupas. “Esta es su base de datos, ya que revisan las propiedades en venta o alquiler. Saben que las propiedades están vacías. En poco tiempo tienen la puerta abierta”.

Lo primero que Fuera Okupas intenta hacer es convencer a los okupas de abandonar la propiedad. Si no tienen éxito, ponen seguridad en la puerta las 24 horas del día para que las personas no puedan ingresar. El precio por este servicio completo es de 2,500 euros más IVA, que incluye el proceso legal, si es necesario recurrir a él. El tiempo promedio que lleva recuperar las propiedades es entre cinco y seis semanas.