El Tribunal Provincial ha condenado al ex alcalde de Jacarilla, José Manuel Gálvez Ortuño (Partido Popular), a ocho meses de prisión y cuatro años de inhabilitación para cargo público por los delitos de fraude contra la Administración.
La sentencia considera probado que Gálvez modificó la ubicación de una planta de tratamiento de aguas residuales en 2006 para beneficiar a un constructor, pasando por alto los procedimientos administrativos. La sentencia reduce sustancialmente la solicitada por la Fiscalía, que pedía ocho años de prisión por un delito adicional de cohecho pasivo, del cual el ex alcalde de este pequeño pueblo de poco más de dos mil habitantes ha sido absuelto.
El tribunal también condenó a los constructores Joaquín Grau Roch (Agrícola del Segura) y Cristina Bernabé y Victoriano Bernabé, de la empresa Benaguas 2000 SL, a cuatro meses de prisión.
La denuncia fue presentada ante la Fiscalía en marzo de 2015 por la ex alcaldesa, Pilar Díez (PSOE), pero no fue hasta este año que llegó a juicio.
El ex alcalde, que ejerció entre 1999 y 2011, también deberá pagar 27.000 euros en responsabilidad civil a los residentes afectados por sus acciones, junto con los demás condenados.
La planta de tratamiento, que finalmente se construyó en 2011 pero nunca se puso en funcionamiento, fue diseñada para resolver el problema de aguas residuales de una pequeña área residencial de Vistabella como parte de un plan de reurbanización adjudicado a Benaguas 2000 por el Ayuntamiento de Jacarilla.
Las aguas residuales del complejo residencial de Vistabella, unas 250 casas, continúan vertiéndose en un estanque agrícola sin tratamiento.