El episodio termina con Oz regresando al apartamento para encontrar a su madre, quien ha vuelto a su estado de demencia, repitiendo una y otra vez que quiere ir a casa. Oz la abraza con ternura, prometiéndole que la llevará a casa pronto.
El episodio 7 de “El Pingüino” ha sido un emocionante capítulo lleno de giros inesperados y momentos intensos. Con la muerte de Sal Maroni y la revelación de Gia sobre Sofía, el futuro de los personajes está más incierto que nunca. ¿Qué les deparará el destino en los próximos episodios? ¡No te pierdas la próxima entrega para descubrirlo!
Sofía le dice a Gia que “todos en nuestra familia eran malas personas que se lo merecían”, pero finalmente sale del encuentro visiblemente conmocionada por lo que le ha hecho a Gia.
Sin embargo, antes de que Sofía pueda procesar eso, Oz llama para decir que Sal está muerto. Él la tienta a bajar a los túneles para cambiar a su madre por Bliss.
Oz y sus hombres esperan armados la llegada de Sofía. Un coche baja por el túnel con Sofía hablando por teléfono con Oz. Ella y Oz hablan, y ella le hace creer a Oz que su madre está muerta en la parte trasera del auto. Abre el baúl y encuentra una bomba con un temporizador cercano a cero. Oz huye, pero la bomba explota y derrumba gran parte de Crown Point sobre ellos. Se ve a Sofía por última vez escoltando a Francis a un club deteriorado llamado Monroe’s.
En otro flashback, vemos a Oz y su madre después de la muerte de sus hermanos. Ella se viste con su mejor vestido y lo lleva a Monroe’s, que en ese momento era un club de jazz de moda. Allí, ella le dice a Oz que debe crecer y darle todo lo que se merece y hacerla feliz, a lo que él acepta con entusiasmo. En el presente, Oz tropieza entre los restos de Crown Point, donde encuentra al detective Marcus Wise, el policía corrupto en nómina de Sofía. Le dice a Oz que lo llevará a Sofía, antes de dejar inconsciente a Oz.