Huracán destructivo deja al menos 51 muertos en la Comunidad Valenciana

Al menos 51 personas han muerto a causa de las inundaciones provocadas por una “catástrofica” DANA en la provincia de Valencia el martes, según los informes provisionales del Centro de Coordinación Operativa Integrada del Ministerio del Interior.

A primera hora de la mañana, el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, habló de “múltiples víctimas”, pero sin confirmar el número exacto “por respeto a las familias”.

Una cifra trágica de pérdida de vidas humanas como consecuencia de las importantes inundaciones causadas por la destructiva DANA que golpeó gran parte de la mitad oriental de España el martes, con las zonas más afectadas en la provincia de Valencia.

ADIF, la empresa pública que gestiona la infraestructura ferroviaria, suspendió todos los viajes en tren en la comunidad a primera hora de la tarde, Albacete, Málaga, Granada y Almería, así como la Región de Murcia.

Las previsiones de los meteorólogos se cumplieron y la peor tormenta de los últimos años, que comenzó el lunes por la noche, cobró fuerza a lo largo del día para terminar golpeando la costa mediterránea de la provincia.

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“Hay muchos cuerpos sin vida y, desafortunadamente, siguen apareciendo”, reconoció el jefe del gobierno regional a los medios de comunicación, añadiendo que no podía dar más detalles “por respeto a las familias” para que puedan estar “adecuadamente informadas”. En cualquier caso, quiso enviar un “mensaje de calma, paciencia y fuerza” a la población, “porque donde no han podido llegar muchas zonas es porque las comunicaciones son absolutamente imposibles”. Los servicios de emergencia están “preparados y listos” para actuar, agregó, y si no pueden llegar a algunos lugares, es porque “o bien hay un colapso en las comunicaciones, o porque las áreas siguen inundadas.”

Una carretera fluye bajo un puente parcialmente colapsado afectado por las lluvias torrenciales que causaron inundaciones en la ciudad de Carlet.

La Comunidad Valenciana fue duramente golpeada por las lluvias, especialmente en las regiones de Ribera Alta y Plana de Utiel-Requena. En esta última ciudad, el volumen superó los 309 litros, en la vecina Turís alcanzó los 299 y en Castelló de la Ribera llegó a los 266, según datos de la Asociación Meteorológica Valenciana (Avamet).

La policía también estaba buscando en la ciudad de l’Alcudia al conductor de un camión que había desaparecido debido a la inundación poco antes de las 13:00. El hombre no respondió a las llamadas a su teléfono móvil ni se puso en contacto con nadie. Sin embargo, su camión fue encontrado estacionado en una calle.

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En la provincia de Valencia, los bomberos trabajaron incansablemente y, entre otras tareas, llevaron a cabo varios rescates de automovilistas atrapados en sus vehículos. En uno de los rescates, el helicóptero del Consorcio Provincial de Bomberos evacuó a varios automovilistas de sus coches.

Las clases fueron suspendidas el martes en varios municipios de Valencia y Alicante, así como en los campus de la Universidad de Valencia, la Universidad Católica, la Universidad Politécnica y el CEU Cardenal Herrera Oria. Un cierre de escuelas que se repetirá el miércoles en ciudades como Valencia, Torrent, Alzira, Chiva, Cullera y Algemesí.

Además de los cierres de las autopistas A-3 y A-7, que conectan el Levante con Madrid y Cataluña, respectivamente, por la tarde se suspendió el tráfico ferroviario en la línea AVE Madrid-Valencia, donde según Renfe hubo 2.722 pasajeros afectados por las suspensiones de trenes.

A esto se sumaron los importantes problemas en varias líneas de Cercanías, así como en el metro de la capital del Turia. Finalmente, ADIF decidió por la tarde suspender los viajes en tren en la Comunidad Valenciana hasta al menos las diez de la mañana del miércoles, cuando las condiciones meteorológicas y el estado de las vías se volverán a evaluar para determinar si se puede reanudar el tráfico sin problemas de seguridad.

Casi toda la actividad en los puertos de la ciudad y en Sagunto quedó paralizada debido a la tormenta marítima. La fuerte tormenta también causó múltiples fallos en las líneas telefónicas, lo que obligó a los técnicos de Telefónica a hacer un esfuerzo adicional para intentar reparar la red. Además, hubo cierres de carreteras locales en varios municipios, incluidos Chiva, Buñol, Siete Aguas, Simat de la Valldigna, Requena, Alzira o Carcaixent, donde se superaron los 100 litros por metro cuadrado. También hubo daños considerables causados por un tornado en Benifaió.

La UME, activa más de 1000 soldados

El Ministerio de Defensa informa que un total de 1.034 soldados, miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME), el Tercer Batallón de Intervención, con base en el cuartel Jaime I de Valencia, fueron activados a media tarde del martes para trasladarse a la región de Utiel-Requena, donde había numerosas personas aisladas y carreteras y caminos inundados.

Según un comunicado del cuerpo justo después de la medianoche, sus miembros estaban “realizando trabajos de rescate y evacuación de personas atrapadas por las inundaciones en Requena, Utiel, Chirivella y Alacuás.”

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En el aeropuerto de Manises, mientras tanto, diez vuelos (ocho salidas y dos llegadas) habían sido cancelados para las 8:00 p.m. y otros doce habían sido desviados (seis a Alicante, cinco a Barcelona y uno a Ibiza) como resultado de las tormentas.

El presidente de la comunidad autónoma, Carlos Mazón, instó a la población a no salir a la carretera, especialmente en la provincia de Valencia, y a quedarse en casa. En el caso de las personas que están fuera, les aconsejó buscar terreno elevado si están cerca de barrancos y cauces de ríos. “La noche va a ser larga”, dijo.

En la provincia de Cuenca, debido a la tormenta, 725 pasajeros permanecieron en la estación de la capital provincial, esperando que se restableciera el tráfico ferroviario normal. Renfe anunció que, además de proporcionar alimentos y bebidas a los pasajeros, establecerá un plan alternativo para continuar su viaje.

Desaparecidos en las montañas

El Servicio de Bomberos de la Diputación de Albacete (SEPEI), asistido por un helicóptero de la Guardia Civil, comenzó la búsqueda en las primeras horas de la tarde de dos personas desaparecidas en el pueblo de Letur (Albacete), en el corazón de la sierra del Segura. Se trata de dos empleados de este Ayuntamiento que fueron vistos por última vez a bordo de una furgoneta, un vehículo que luego apareció abandonado en una rambla.

Durante varias horas se les llamó regularmente por teléfono sin éxito, ya que las comunicaciones telefónicas en el pueblo no funcionaban durante todo el martes. Otras cuatro personas que habían salido a la montaña desde el pueblo también estaban siendo buscadas al anochecer.

Además, la Cruz Roja instaló un refugio temporal en la escuela pública Nuestra Señora de la Asunción en Letur, ya que las fuertes lluvias afectaron muchas viviendas y las dejaron inhabitables. Allí se llevaron a 60 personas afectadas por las inundaciones. Otras 30 personas quedaron atrapadas en sus hogares y docenas tuvieron que refugiarse en los bares del pueblo.

Otro pueblo en la provincia de Albacete afectado por esta tormenta fue Molinicos, donde las precipitaciones alcanzaron los 120 litros por metro cuadrado. Una de sus vías de acceso quedó cortada por un deslizamiento de tierra.

Inundaciones y granizo

Las tormentas que cayeron durante la madrugada del martes causaron daños significativos en Andalucía, cerrando numerosas carreteras y suspendiendo clases en varias escuelas de la provincia. En Alora (Málaga), un tren de alta velocidad que viajaba desde la capital de la Costa del Sol a Madrid descarriló, sin causar heridos.

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Uno de los ejes del motor delantero descarriló como resultado de un arroyo desbordado. Los pasajeros fueron trasladados a otro tren para continuar su viaje. Asimismo, los trabajadores de Adif lograron restablecer el servicio en las vías de ancho convencional cerca de Málaga, pero el tráfico ferroviario entre Gobantes y El Chorro seguía interrumpido a primera hora de la tarde.

Uno de los pueblos de Málaga que fue más golpeado por la tormenta fue Alora, donde las inundaciones inundaron grandes áreas. Los pluviómetros registraron alrededor de 150 litros por metro cuadrado. Varias personas tuvieron que ser evacuadas por helicóptero por la Guardia Civil en el barrio El Puente de Isla Hermosa después de que el río Guadalhorce se desbordara, alcanzando un nivel de agua de 4,2 metros.

En Marbella, un rayo causó un incendio en una casa de dos pisos. En la región de la Axarquía, se registraron alrededor de 100 litros por metro cuadrado durante la noche.

En la vecina Almería, la peor parte de la tormenta la soportaron los residentes de El Ejido. Las fuertes tormentas de granizo destruyeron techos, coches, mobiliario urbano y, sobre todo, cultivos. Según la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), las tormentas y el granizo habrían causado daños en cultivos e instalaciones en la región occidental de Almería por valor de unos 30 millones de euros y afectado unas 11.300 hectáreas.

En Granada, las fuertes lluvias también provocaron inundaciones en Baza, Guadix y las Sierras Orientales. En Cúllar, la Guardia Civil tuvo que rescatar a una pareja que viajaba en coche con sus hijos, de 1, 3 y 5 años, cuando quedaron atrapados en las aguas de una rambla en el camino de tierra de la Rambla del Lagarto. Asimismo, agentes del instituto armado rescataron a los ocupantes de un vehículo con remolque en el distrito de Tarifa.

Las tormentas también inundaron grandes áreas de la región de Murcia, con cierres de carreteras en los pueblos de Cehegin y Caravaca, donde se recogieron hasta 121 litros por metro cuadrado. El viento en Lorca alcanzó ráfagas de alrededor de 50 kilómetros por hora. Este viento y el estado del mar provocaron que un velero se hundiera en el puerto de Águilas.