“Donald Trump is leading among men, while women are showing a preference for Kamala Harris in the polls. This political gender gap reflects societal changes over the past decade and could impact the outcome of the US election. Despite being the first woman of color to secure a presidential nomination and the second woman to come this close, Kamala Harris avoids discussing her identity. Gender is becoming a defining issue in this campaign, with some believing hidden sexism may deter voters from supporting a female president. While the Trump campaign denies gender playing a role, some see it as a factor. The election has turned into a referendum on gender norms and social upheavals, particularly for young men who may feel left behind in a changing world. Trump has capitalized on male frustration, emphasizing masculinity in his campaign messaging. The gender split among young voters has widened over the years, with young women making significant advancements compared to young men.” La BBC “Cuando se duchaba con los otros profesionales, salían de allí – decían, ‘Dios mío. Eso es increíble.’”
Trump sacó la charla de vestuario del vestuario – y a su audiencia le encantó. Improvisando sobre el tamaño del pene en un mitin político, fue la máxima respuesta contra la política correcta.
En sus mítines, y en las ondas, la respuesta de los Demócratas a los hombres descontentos parece ser una dosis de amor duro. Barack Obama regañó que algunos hombres “no sienten la idea de tener una mujer como presidenta y están buscando otras alternativas y otras razones para eso.” En un nuevo anuncio de televisión, el Actor Ed O’Neill fue un poco más directo pero más directo: “Sé un hombre: Vota por una mujer.”
En los últimos días de esta campaña, el género está en todas partes – y en ninguna parte.
Donald Trump quiere que la hombría esté en el centro de esta carrera. Kamala Harris apenas reconoce que es una mujer que se postula para un cargo. En una encuesta del New York Times, Trump lidera con los votantes masculinos por 14%. Harris lidera a las mujeres por 12%.
Señoras y señores, niños y niñas – podrían decidir esta elección.