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Momentos de distracción.
Crédito: Alejandro J. Vivas -Shutterstock
La Policía Nacional ha detectado el regreso del antiguo y conocido timo de la mancha de excremento de pájaro en Málaga: ten cuidado si te avisan de que tienes excremento de pájaro en la ropa.
Un momento de confusión es aprovechado por un estafador para el robo de objetos de valor, teniendo una cierta predilección por las tarjetas bancarias. La Policía Nacional ha detectado el regreso del antiguo timo de la mancha de excremento de pájaro en el centro de Málaga. Recientemente, al menos ocho turistas han sido víctimas de un modus operandi anticuado utilizado por ladrones.
Recientemente, los agentes han arrestado a un hombre de 56 años que, después de acercarse a ciudadanos extranjeros en el casco antiguo de Málaga, amablemente se ofreció a limpiar una supuesta mancha de excremento de pájaro en su ropa. Previamente, el ‘afable’ ciudadano masticaba algunas galletas e, intencionadamente, dirigía algo de saliva, con la mezcla, a la ropa de sus objetivos. Un momento de confusión fue aprovechado por el sospechoso para el robo de efectos valiosos, teniendo en este caso una predilección específica por las tarjetas bancarias.
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Una operación, llevada a cabo por agentes adscritos a la Comisaría del Distrito Centro de Málaga, comenzó cuando se recibió una avalancha de denuncias en las que las víctimas, en su mayoría extranjeros, se quejaban del robo de sus pertenencias por parte de un desconocido.
Se ofrecía amablemente a los turistas para limpiar, aparentemente, manchas de excremento de pájaro de su ropa
El sospechoso se ofrecía amablemente a los turistas para limpiar, aparentemente, manchas de excremento de pájaro de su ropa, aprovechando cualquier momento de descuido de las víctimas para robar sus pertenencias.
Según la investigación, el carterista utilizaba prendas como sombreros y boinas para dificultar que la policía lo identificara a través de las grabaciones de CCTV. También llevaba una riñonera donde, según las investigaciones, guardaba galletas que masticaba al acercarse a sus víctimas.
Con este modus operandi, el sospechoso robó efectos de valor a ocho turistas, teniendo una preferencia por sus tarjetas bancarias. Varios de los afectados reportaron cargos fraudulentos en sus cuentas bancarias después de su robo.