William Ruto, Rigathi Gichagua y Raila Odinga: Las alianzas siempre cambiantes de Kenia

President William Ruto and Rigathi Gachagua were once close allies, but their relationship has taken a sour turn. Losing a deputy so soon after being elected could be detrimental to a president, but in Kenya, the removal of Gachagua was swift and necessary to prevent further dysfunction in the government. The impeachment process, though orderly, has stirred strong emotions across the country, particularly in Mount Kenya where Gachagua hails from. Ruto’s choice to replace him with Kithure Kindiki, also from the same region, has somewhat pacified the region, which plays a crucial role in Kenyan politics.

Gachagua’s attempts to solidify his influence in Mount Kenya backfired, leading to his downfall. His divisive rhetoric and focus on regional interests instead of national unity did not sit well with many legislators. Ruto, despite pleas for intervention, remained silent during the impeachment proceedings, possibly learning from the fallout between him and Kenyatta in the past. The alliance between Ruto and former rival Raila Odinga played a significant role in Gachagua’s removal, showing a shift in political dynamics that may impact Ruto’s support in Mount Kenya.

The future of Ruto’s alliance with Odinga remains uncertain, as their collaboration in Gachagua’s impeachment could have repercussions. The intricate web of political interests at play may pose challenges for Ruto as he navigates the political landscape leading up to the next elections. Sin embargo, es característico del cambiante panorama político de Kenia.

Por ahora, Ruto ha nombrado a cuatro miembros senior del partido de Odinga al gabinete y lo está respaldando para el influyente cargo de presidente de la próxima comisión de la Unión Africana.

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Los dos hombres tienen una larga historia política juntos, ya sea como aliados o rivales.

En las elecciones presidenciales de 2002, Ruto respaldó a Kenyatta mientras que Odinga apoyó a Kibaki, quien luego ganó.

Cinco años después, las lealtades cambiaron con Ruto apoyando a Odinga y Kenyatta respaldando al titular, Kibaki, en las disputadas elecciones de 2007 que derivaron en violencia a nivel nacional.

Ruto y Kenyatta fueron posteriormente acusados por la Corte Penal Internacional por sus presuntos roles en los enfrentamientos mientras apoyaban bandos opuestos.

Pero en las siguientes dos elecciones de 2013 y 2017, se postularon en una misma boleta y derrotaron a Odinga.

Los casos en su contra en la CPI finalmente fueron desestimados por falta de evidencia.

En la política keniana, cualquier alianza es posible, sin importar lo improbable que parezca para el extranjero.

Todo lo que intentan hacer los líderes nacionales es mantener sus bloques regionales o étnicos intactos para usarlos como moneda de cambio al buscar asociaciones y una fórmula para ganar elecciones nacionales.

Tanto Ruto como Odinga han trabajado durante mucho tiempo hacia eso, habiendo ingresado a la política en su juventud.

Ambos tienen bases de apoyo leales, como muestra su reciente alianza con los seguidores de Odinga que se han cambiado totalmente detrás de un político al que se oponían casi en su totalidad hace solo dos años.

Gachagua esperaba lograr la misma estatura, pero su ambición por ahora lo ha perjudicado.

Él está desafiando su destitución en la corte y si tiene éxito, todavía podría darle una oportunidad política. Si no, la ley le prohíbe postularse para un cargo por al menos 10 años.

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Este tipo de política es un juego largo. A los 59 años, Gachagua es un participante bastante tardío y su futuro es incierto.

Podría ser condenado al olvido político o aún podría regresar al ruedo, como rival de Ruto o incluso como su aliado.

A pesar de lo que parece ser un amargo divorcio, con el presidente avanzando rápidamente, a nadie en Kenia le sorprendería verlo estrechar la mano y sonreír en la televisión nacional con su ex vicepresidente distanciado.

La escena política de Kenia es una zona sísmica activa: las placas tectónicas están constantemente cambiando y todo es posible.

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