Corea del Norte cortará el acceso por carretera y ferrocarril a Corea del Sur a partir del miércoles en un intento de “separar completamente” a los dos países. Su ejército dijo que el Norte “cerraría y bloquearía permanentemente la frontera sur” y fortificaría áreas en su lado. El Ejército Popular de Corea (KPA) describió la medida como “una medida de autodefensa para inhibir la guerra”, afirmando que era en respuesta a ejercicios de guerra en Corea del Sur y la frecuente presencia de activos nucleares estadounidenses en la región. Marca una escalada de hostilidades en un momento en que las tensiones entre las Coreas están en su punto más alto en años. “La aguda situación militar que prevalece en la península coreana requiere que las fuerzas armadas de la RPDC (República Popular Democrática de Corea) tomen una medida más resuelta y más fuerte para defender de manera más creíble la seguridad nacional”, dijo el KPA en un informe publicado por el medio de comunicación estatal KCNA. La declaración es un paso en gran parte simbólico por parte de Pyongyang. Las carreteras y ferrocarriles que van de Corea del Norte al Sur rara vez se utilizan y han sido desmantelados gradualmente por las autoridades norcoreanas en el último año. También se produce en medio de un impulso más amplio por parte de Pyongyang para cambiar su relación con el Sur, y sigue a una serie de incidentes inflamatorios que han herido las relaciones entre los dos países. Esos incidentes han variado desde pruebas de misiles hasta cientos de globos de basura enviados sobre la frontera sur de Corea del Norte. Cabe destacar que el líder norcoreano Kim Jong-un anunció a principios de 2023 que ya no estaba luchando por la reunificación con el Sur, lo que plantea preocupaciones de que la guerra podría reanudarse en la península coreana. “Creo que es necesario revisar algunos contenidos de la Constitución de la RPDC”, dijo Kim en una reunión de la Asamblea Popular Suprema de Corea del Norte (SPA) en enero. “En mi opinión, es necesario eliminar expresiones como ‘mitad norte’ e ‘independencia, reunificación pacífica y gran unidad nacional’ de la constitución”, agregó, sugiriendo que la constitución debería ser revisada “en la próxima sesión”. Esa próxima sesión se celebró esta semana y concluyó el martes. Sin embargo, si bien muchos espectadores esperaban que Pyongyang ratificara los comentarios anteriores de Kim y hiciera enmiendas constitucionales a las políticas de unificación y fronterizas, no se publicaron tales cambios. Un analista del Instituto de Unificación Nacional de Corea sugirió que Pyongyang podría estar esperando el resultado de las elecciones en EE. UU. antes de tomar decisiones concretas. Los funcionarios podrían “considerar ajustar el alcance de las revisiones constitucionales para alinearse con la dirección de la nueva administración (estadounidense)”, dijo Hong Min a la agencia de noticias AFP. No está claro si la decisión de Corea del Norte de cortar todas las carreteras y ferrocarriles que la conectan con el Sur fue resultado de discusiones durante la sesión de la SPA.
