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¿Es este el momento adecuado para aumentar la tasa turística? En un momento en el que muchos turistas encuentran la isla cada vez más cara, el gobierno balear decide aumentar los impuestos. Los turistas en hoteles de cinco estrellas ya están pagando cuatro euros (por persona y día), por lo que el aumento podría llevarlos a llevar su negocio a otro lugar (y este es el tipo de turistas que la isla quiere atraer desesperadamente).
El anuncio realizado por la presidenta balear Marga Prohens sorprendió a muchos. El aumento había sido considerado por el gobierno pero luego descartado, o eso parecía. Pero el miércoles, Prohens dijo que el aumento formaba parte de las medidas que se introducirían para frenar el turismo de masas.
La industria turística ha reaccionado con enojo ante la medida, con hoteleros que dicen que el gobierno debería estar haciendo más para acabar con los alquileres turísticos ilegales en lugar de penalizar a los turistas que se alojan en alojamientos legales.
El gobierno balear se comporta como si todo estuviera bien dentro de la industria turística. El turismo británico, el principal mercado después de Alemania, cayó en las Baleares en julio y agosto (un 10 por ciento en julio y casi un cinco por ciento en agosto). El turismo en la península también ha disminuido y los bares y restaurantes informan de una caída del 20 por ciento en las ganancias.
El único punto positivo es que el turismo alemán sigue avanzando y este aumento compensará la disminución de turistas británicos y de la península. ¿Una temporada récord en cuanto a número de visitantes? Sí, pero probablemente se podría describir como promedio en general.
Entonces, la gran pregunta; ¿es este el momento adecuado para aumentar el impuesto turístico? Bueno, no. Sin embargo, a nivel nacional, el gobierno balear tiene que demostrar que está haciendo algo para contrarrestar el turismo de masas tras las protestas del verano pasado. Existe un creciente rechazo al turismo. Las protestas tendrán un impacto en las reservas. Tuvieron poco o ningún efecto este año porque la mayoría de las personas ya habían reservado, pero el próximo verano podría ser diferente. Aprecio que haya un elemento anti-turismo en la isla, pero aumentar la tasa turística no es el camino a seguir, especialmente cuando muchos hogares están sintiendo aprietos económicos.
El problema principal es que una parte considerable de la población ha dejado de amar el turismo. Ya no existe la percepción, entre algunos, de que la isla necesita tantos turistas como sea posible para su bienestar económico. El gobierno debería hacer más para subrayar la importancia del turismo para la isla y la economía. Se puede imaginar los titulares en la prensa del Reino Unido: “la isla que ya no nos quiere ha decidido aumentar los impuestos…”.
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