Israel dijo el martes que estaba intensificando su campaña de bombardeos en Líbano, ya que dos días de ataques aéreos dirigidos contra la milicia chiíta Hezbollah elevaron el número de muertos a más de 550 y obligaron a decenas de miles de personas a abandonar sus hogares.
Los muertos incluyeron al jefe de cohetes de Hezbollah y a dos empleados de agencias de ayuda de la ONU.
“No debemos permitir que Hezbollah descanse. Debemos continuar con toda nuestra fuerza”, dijo el jefe de Estado Mayor israelí, el general Herzi Halevi, según fuentes militares.
Los ataques se intensificarán y se desplegarán más fuerzas militares, dijo. La Fuerza Aérea Israelí dijo que había golpeado “objetivos terroristas de Hezbollah en el sur de Líbano, incluidos lanzadores, sitios de infraestructura terrorista y edificios donde se almacenaban armas”.
El IDF anunció más tarde que había matado al jefe de cohetes de Hezbollah en el suburbio de Beirut de Ghobeiry.
Dijeron que Ibrahim Qabisi era responsable de ataques con cohetes contra Israel y contra civiles. Además de Qabisi, otros comandantes de la unidad de cohetes también fueron asesinados, agregó un comunicado.
El IDF dijo que Qabisi “planeó el ataque terrorista de secuestro en el Monte Dov en la década de 2000” en el que tres soldados israelíes fueron “secuestrados y asesinados”. Los cuerpos de Omar Suwad, Benny Avraham y Adi Avitan fueron devueltos a Israel en 2004 en un intercambio de prisioneros entre Israel y Hezbollah mediado por Alemania.
El Ministerio de Salud libanés dijo que seis personas murieron y 15 resultaron heridas en el ataque. Testigos informaron que dos pisos de un edificio habían sido destruidos y videos mostraron grandes nubes de humo.
También el martes, cuatro residentes y un refugiado sirio murieron en ataques israelíes en el pueblo libanés de Duair al sur de Beirut, mientras que seis personas murieron en ataques aéreos en Nabatijeh, informó la agencia de noticias estatal libanesa NNA.
Decenas de miles huyen
Decenas de miles de personas en Líbano han sido desplazadas por los ataques aéreos israelíes, según cifras oficiales publicadas el martes.
De los desplazados, 27,000 han buscado refugio en albergues de emergencia en el sur y en el valle de Bekaa en el este, dijo Nasser Jassin, ministro interino de Medio Ambiente.
Más de 250 escuelas se han convertido rápidamente en albergues de emergencia con este propósito. Desde entonces, se han distribuido suministros básicos de socorro, artículos de higiene y comidas a alrededor de 20,000 personas. Los colchones son particularmente escasos en los refugios.
La organización de ayuda Médicos Sin Fronteras (MSF) informó que los equipos estaban distribuyendo colchones y artículos de higiene en albergues de emergencia en todo el país. También hay centros de asesoramiento telefónico para personas desplazadas que les brindan apoyo psicológico.
Muchos empleados de MSF permanecieron en sus hogares en el sur y el este debido a los ataques israelíes en curso, mientras que otros huyeron.
La milicia responde
Hezbollah, que tiene su base en Líbano pero está respaldada por Irán, dijo que lanzó numerosos ataques, incluido un ataque a una base militar en el norte de Israel cerca de la ciudad de Safed. El ejército israelí también dijo que había registrado alrededor de 300 proyectiles disparados desde Líbano hacia territorio israelí en los últimos dos días.
La milicia dijo que envió una salva de cohetes a bases militares israelíes, incluidos los cohetes más pesados Fadi-1 y Fadi-2.
El grupo respaldado por Irán dijo que atacó bases cerca de la ciudad israelí de Haifa, un aeródromo militar al oeste de Afula y otros lugares, incluida la ciudad de Rosh Pina.
El ejército de Israel dijo que Hezbollah ha lanzado más de 8,800 cohetes y drones en poco menos de un año. Hasta la reciente escalada, Hezbollah había utilizado principalmente cohetes y drones más pequeños contra Israel.
Días mortales en Líbano
El número de personas muertas en dos días de ataques aéreos israelíes en Líbano ha aumentado a 558, con alrededor de 1,835 heridos, dijo el ministro de Salud libanés Firas Abiad.
Alrededor de 50 niños estaban entre los muertos, dijo. Los heridos estaban siendo atendidos en más de 54 hospitales y centros médicos en Beirut y el sur de Líbano, agregó Abiad, quien es ministro de Salud en un gobierno interino.
La agencia de refugiados de las Naciones Unidas (ACNUR) dijo que dos de sus empleados murieron en ataques israelíes en Líbano, y añadió que estaba “indignada y profundamente entristecida” por las muertes.
Dina Darwiche, de su oficina en Bekaa en el este de Líbano, murió después de que el edificio en el que residía fuera alcanzado por un misil israelí el lunes, dijo ACNUR en un comunicado.
“Su esposo y uno de sus hijos fueron rescatados y están siendo tratados en el hospital por heridas graves. Los cuerpos de Dina y su hijo menor fueron recuperados trágicamente hoy”, dijo el comunicado.
Agregó que Ali Basma, quien también trabajaba en la oficina de ACNUR en Tiro, en el sur de Líbano, fue confirmado muerto el lunes.
A medida que la guerra en Gaza se acerca a su primer aniversario, los ataques israelíes marcan una escalada dramática del conflicto con Hezbollah en el norte.
En otro golpe importante a Hezbollah la semana pasada, cientos de pagers y walkie-talkies utilizados por sus miembros explotaron en todo Líbano. Muchos observadores atribuyeron el ataque a Israel, aunque Israel no ha reclamado oficialmente la responsabilidad.
Un hombre pasa por un coche destruido y un edificio dañado que fueron alcanzados por un ataque aéreo israelí en el suburbio sur de Beirut. Según el Ministerio de Salud libanés, seis personas murieron y 15 resultaron heridas en el ataque, que apuntaba al jefe de cohetes de Hezbollah, según el ejército israelí. Marwan Naamani/dpa
Soldados del ejército libanés están desplegados en el lugar donde un edificio fue alcanzado por un ataque aéreo israelí en el suburbio sur de Beirut. Según el Ministerio de Salud libanés, seis personas murieron y 15 resultaron heridas en el ataque, que apuntaba al jefe de cohetes de Hezbollah, según el ejército israelí. Marwan Naamani/dpa”