Hollywood está lleno de momentos tentadores de “¿qué hubiera pasado si…?”; decisiones tomadas en el momento que tienen repercusiones de largo alcance para todos los involucrados. ¿Qué hubiera pasado si Robert Zemeckis hubiera perseverado con Eric Stoltz en el set de Back to the Future, en lugar de traer a Michael J Fox? ¿Qué hubiera pasado si Tom Selleck hubiera interpretado a Indiana Jones en lugar de Harrison Ford? ¿Qué hubiera pasado si, como inicialmente querían los productores de la película, Robert Altman hubiera dirigido Alien?
Y ahora podemos agregar otro gran misterio a la lista. ¿Qué hubiera pasado si David Schwimmer hubiera protagonizado Men in Black en lugar de Will Smith?
Aparentemente, como reveló Schwimmer en un episodio reciente de un podcast, este era originalmente el plan. Cuando se le ofreció el papel de MiB, Friends llevaba en el aire unos años y Schwimmer era lo más popular en ese momento. Sin embargo, acababa de protagonizar una película – The Pallbearer de 1996 – que fue un fracaso crítico y comercial, y quería probar suerte como director en lugar de actor. Consiguió una película con Miramax llamada Since You’ve Been Gone, justo cuando le llegó la oferta para protagonizar Men in Black. Se encontraba ante una decisión difícil, y la historia ya ha registrado su elección.
Quizás, no fue la correcta. Since You’ve Been Gone terminó siendo degradada de un estreno en cines a una película para televisión que pocos recuerdan, mientras que Will Smith consiguió el papel en Men in Black y se convirtió en una megaestrella instantánea. “Mira, soy muy consciente, ya sea 20 años después, tal vez más, [Men in Black] me habría convertido en una estrella de cine”, suspira Schwimmer en el podcast. “Si miras el éxito de esa película y esa franquicia, mi carrera habría tomado una trayectoria muy diferente”.
No todo es malo … el elenco de Friends se reunió. Fotografía: Photo 12/Alamy
¿O sí lo sería? Puede ser fácil para Schwimmer mirar con envidia a Men in Black. Incluso podría haberlo llevado a ver los éxitos posteriores de Will Smith como propios. Después de todo, a principios de los 90 eran solo estrellas de sitcom bien queridas. Tal vez Schwimmer habría protagonizado Yo, Robot e Soy Leyenda en lugar de Smith. Tal vez habría logrado grandes éxitos grabando las canciones de varias de sus películas. Tal vez, incluso, habría interpretado a Muhammad Ali o se habría estrellado en los premios Óscar. ¿Quién puede decirlo?
Sin embargo, no es realmente así como funcionan las cosas. Por mucho que Schwimmer diga que Men in Black lo habría convertido en una estrella, también es posible que Will Smith haya hecho de Men in Black un éxito. Él no salió de la nada para conseguir el papel. En los dos años anteriores a Men in Black había protagonizado un par de auténticos éxitos de taquilla en Bad Boys e Independence Day, además de estar cuidadosamente construyendo su marca como un artista completo de canto y baile. Su próxima película, cualquiera que fuera, siempre iba a atraer mucha atención.
Mientras tanto, Schwimmer tenía The Pallbearer (que debutó en el puesto 9 en la taquilla de EE. UU. al ser estrenada), y con la excepción de la serie de Madagascar, no ha demostrado ser un gran atractivo en taquilla. ¿Alguien recuerda All the Rage? ¿Picking Up the Pieces? ¿Duane Hopwood, la película de 2005 sobre un hombre llamado Duane Hopwood? Lo cual no quiere decir que estas sean malas películas o que Schwimmer sea malo en ellas, más bien que no tuvieron el mismo impacto que, por ejemplo, Hitch.
También es genuinamente imposible imaginar a Schwimmer como el Agente J en Men in Black. Inténtalo ahora. La actitud fresca y segura de Smith definía ese papel, y la seguridad no es algo que Schwimmer tenga en abundancia. Puede ser ansioso y complicado y interpretar muy bien a alguien fuera de su elemento, pero intenta imaginarlo poniéndose unas gafas de sol y diciéndole a Tommy Lee Jones “Hago que esto se vea bien”. Realmente inténtalo. Intenta imaginarlo diciéndolo sin ironía. Intenta imaginarlo diciéndolo sin un signo de interrogación al final. Es realmente imposible.
Lo cual no quiere decir que Schwimmer deba castigarse por esta oportunidad perdida. Es 2024. Smith se ha convertido en un chiste internacional gracias a su pérdida de control en los premios Óscar, y su carrera nunca se recuperará por completo. Mientras tanto, el éxito duradero de Friends – una sitcom que hizo hace 30 años – significa que Schwimmer sigue recibiendo $20 millones (£15 millones) al año en regalías de retransmisión sin tener que mover un dedo. A veces, independientemente de tus malas decisiones, el universo tiene una forma de hacer que todo esté bien.