La Comunidad Valenciana fue la tercera región con el mayor número de certificaciones de ejecuciones hipotecarias o embargos de viviendas habituales durante el segundo trimestre de este año, con un total de 541, solo superada por Andalucía y Cataluña.
En España, el número total de inscripciones de certificados de ejecuciones hipotecarias o embargos en vivienda habitual disminuyó un 17,5% en el segundo trimestre en comparación con el mismo período en 2023, lo que significa que hay nueve trimestres de disminución, según el INE.
Sin embargo, en general, el número de certificados de ejecución hipotecaria presentados en los registros de la propiedad aumentó un 3,3% interanual a 5.534.
Las ejecuciones hipotecarias en todos los tipos de viviendas, que representaron el 58,3% del total, disminuyeron un 13,2% interanual en el trimestre; las ejecuciones hipotecarias en individuos cayeron un 17,1% y las ejecuciones hipotecarias en entidades jurídicas cayeron un 17,2%.
Del total de ejecuciones hipotecarias, el 40,6% correspondieron a las viviendas habituales de individuos, el 9% a entidades jurídicas y el 8,7% a otras viviendas de individuos.
Las ejecuciones hipotecarias en otras zonas urbanas representaron el 33,4% del total.
En cuanto al estado del mercado inmobiliario, el 7,6% de las ejecuciones hipotecarias en el segundo trimestre fueron en viviendas nuevas, que cayeron un 14,1%, y el 92,4% en viviendas usadas, que cayeron un 13,1%.
Desglosadas por comunidad autónoma, las que registraron el mayor número de certificaciones de ejecución hipotecaria sobre el número total de propiedades fueron Cataluña (958); Andalucía (990) y la Comunidad de Madrid (881), mientras que La Rioja (12), la Comunidad Autónoma de Navarra (36) y Extremadura (61) tuvieron las cifras más bajas.
En el caso de las viviendas, Andalucía (695), Cataluña (690) y la Comunidad Valenciana (541) tuvieron el mayor número de ejecuciones hipotecarias, y las cifras más bajas fueron en La Rioja (10), Navarra (12) y Extremadura (31).