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La Guardia Civil estima que el británico Alexander Johnson, de 32 años, fue arrastrado casi tres kilómetros por la fuerza del torrente de agua que lo mató el martes.
Su cuerpo fue encontrado el viernes por la mañana en la desembocadura del Torrent de Pareis en Sa Calobra. El cuerpo estaba en una gran poza que tenía unos dos metros de profundidad el jueves. El agua había disminuido considerablemente para el viernes por la mañana, y un helicóptero de la Guardia Civil detectó lo que parecía ser un cuerpo.
Los buceadores de la Guardia Civil y el equipo de rescate en montaña se dirigieron a la zona, donde recuperaron el cuerpo.
Los rescatistas tenían muy poca esperanza de encontrarlo con vida. El jueves descubrieron pantalones y un zapato que le pertenecían.
Una autopsia buscará establecer si murió por ahogamiento o por la fuerza del agua que lo habría arrastrado varios metros.
Desapareció el martes después de que la zona en la Sierra de Tramuntana fuera golpeada por fuertes lluvias. El cuerpo de su pareja, Sarah Jane Thompson, de 26 años, fue encontrado el miércoles.
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