El campeón mundial supergallo indiscutible de Japón, Naoya Inoue, abrió la puerta para una pelea en Las Vegas el próximo año después de retener sus títulos contra el irlandés TJ Doheny en Tokio el martes.
El invicto “Monstruo” ganó por nocaut técnico en el séptimo asalto en el Ariake Arena cuando Doheny comenzó a cojear y no pudo continuar después de lesionarse la cadera.
El Inoue de 31 años, que llevó su récord a 28-0 con 25 victorias por nocaut, estaba haciendo su segunda defensa desde que se convirtió en campeón mundial supergallo indiscutible en diciembre pasado.
El legendario promotor estadounidense Bob Arum dijo en una entrevista en el ring que Inoue defendería sus títulos una vez más en Tokio en diciembre antes de pelear en una “gran celebración” en Las Vegas el próximo año.
Inoue dijo que aún no se ha decidido nada, pero se negó a descartar la posibilidad de una primera pelea en Estados Unidos desde junio de 2021.
“Esta pelea acaba de terminar, así que no tengo nada que decir”, dijo Inoue cuando se le preguntó sobre los comentarios de Arum.
“También tenemos conversaciones sobre diciembre y me gustaría hablar con mi promotor al respecto y decidir.”
Inoue es solo el segundo hombre en convertirse en campeón mundial indiscutible en dos pesos diferentes desde el inicio de la era de los cuatro cinturones en 2004. El estadounidense Terence Crawford fue el primero.
Inoue estaba peleando por primera vez desde que venció al mexicano Luis Nery frente a 55,000 fanáticos en el Tokyo Dome en mayo.
Esa pelea vio al luchador japonés derribado por primera vez en su carrera, pero nunca pareció estar en peligro grave contra el Doheny de 37 años el martes.
Inoue tuvo que ser paciente contra su cauteloso oponente, pero comenzó a conectar algunos golpes fuertes al cuerpo a medida que avanzaba la pelea.
La pelea se detuvo abruptamente cuando Doheny comenzó a cojear repentinamente unos 20 segundos en el séptimo asalto.
No pudo caminar y tuvo que ser ayudado a salir del ring por su equipo.
El entrenador de Doheny, Héctor Bermúdez, dijo que su luchador se había lesionado un nervio ciático en el sexto asalto y “hizo todo lo posible” para continuar.
“Sé que Inoue hizo una pequeña ráfaga, una combinación de tres golpes, pero eso no fue lo que lo lesionó”, dijo Bermúdez.
“Ya estaba lesionado en el asalto anterior.”
Se esperaba que Inoue dominara desde el principio, pero Doheny se mantuvo en la pelea y hizo que el campeón trabajara duro para encontrar una apertura.
Inoue dijo que su plan era comenzar la pelea de manera cautelosa y aumentar el ritmo alrededor de los sexto y séptimo asaltos.
Dijo que su objetivo para la pelea había sido “vencerlo con boxeo”.
“Quizás todos esperaban que la pelea resultara un poco diferente”, dijo.
“Pero personalmente, no es algo de lo que esté preocupado.”
Doheny, quien tuvo el título mundial supergallo de la IBF de 2018 a 2019, vio caer su récord a 26-5, con 20 KOs.
En la cartelera, el japonés Yoshiki Takei retuvo su título mundial de peso gallo de la OMB con una victoria por decisión unánime sobre su compatriota Daigo Higa.
Takei estaba haciendo su primera defensa después de tomar el título del australiano Jason Moloney en mayo.