La hija de un conductor de taxi de burros ha hablado después de que un turista británico fue ‘golpeado’ en Mijas, Andalucía.
Un usuario de redes sociales que afirma ser la hija de un conductor de burros en Mijas ha dado su ‘versión de la historia’ después de que un turista británico fuera atacado por filmar a los burros el domingo.
Comentó en una página de Instagram local, en una publicación de Fuengirolasequeja que mostraba un video del ataque.
La usuaria @Andreatr10 afirmó que la víctima, Ian Grace, ‘filmó a los conductores de burros entre las 2 de la tarde y las 7 de la tarde sin su consentimiento, subiendo el contenido a las redes sociales y acosando a los turistas que decidieron dar un paseo en burro’.
Andrea dice que el ‘abuso’ continuó hasta que los conductores de burros se vieron obligados a recoger debido a las altas temperaturas a las 7 de la tarde.
“Me gustaría saber cómo reaccionarían si alguien fuera a su negocio y les dijera a la gente que no entrara todo el día”, dijo.
“Sin duda, algunos de ustedes habrían tenido menos paciencia y habrían reaccionado de la misma manera.”
Continuó diciendo que su padre ‘no es un abusador’ y que ‘cuida muy bien’ de los burros.
Andrea afirma que siempre han tenido que soportar críticas, pero dice que se convirtió en ‘acoso’ hace aproximadamente un mes después de que un video de un burro colapsara por el calor se volviera viral en las redes sociales.
Implicó que el burro simplemente se cayó, ‘como cualquier animal podría hacerlo’.
“Los conductores de burros trabajan muy duro día tras día para llevar el pan a casa”, dijo.
En una entrevista exclusiva con Olive Press, la víctima, Ian Grace, dijo que estaba filmando a los burros al ver que los sacaban a pesar del calor extremo.
Sugirió reunirse con la joven y otros activistas para debatir el tema.
“No podemos legitimar el abuso y la explotación animal diciendo que está dando de comer a alguien y alimentando a su familia; lo importante es trabajar con personas como esta joven y discutir otras formas que no incluyan la explotación animal”.
“No visité Mijas Pueblo para ser agredido por un dueño de burros iracundo – él estaba en público y es legítimo filmar en lugares públicos abiertos en interés público; estaba documentando el cumplimiento de la ley por la mayoría de los dueños de burros antes de ser agredido”.
“Es fácil para esta joven tratar de justificar lo que está sucediendo en Mijas Pueblo, después de todo ella come el pan en la mesa ganado por el dolor continuo y la explotación de estos pobres burros, obligados a arrastrar pesos pesados por las calles empedradas de Mijas Pueblo.” The Olive Press señala que las reglas establecidas por el ayuntamiento de Mijas para proteger a los burros son recomendaciones y, por lo tanto, no son legalmente vinculantes.