Después de no completar su primer levantamiento en arrancada con 100kg y salir temprano de la competencia, la joven de 20 años Sarno no pudo darle al Equipo Filipinas una medalla en el evento de levantamiento de pesas femenino de los Juegos Olímpicos de París 2024.
Sin embargo, lo más intrigante es que Sarno dijo que sintió que ya había perdido desde sus días en el campo de entrenamiento en Metz, Francia.
“Sobrang naging down at mahina ako kasi ‘yong time na start ng Metz training, [parang] do’n ako natalo. Sobrang hirap gumalaw na ‘yong mga tao sa paligid mo, di ka na komportable. Sila dahilan bakit parang nagkadepression na ko sa sport ko,” dijo Sarno en una entrevista con reporteros filipinos en París.
“(Me sentí muy deprimida y débil, parecía que ya había perdido desde el inicio del entrenamiento en Metz. Fue tan difícil moverme sabiendo que la gente a mi alrededor me hacía sentir incómoda. Ellos fueron la razón por la que sentí que me estaba deprimiendo con mi deporte.)
“Sobrang toxic ng environment, pangit pag gano’n, pagdating ng preparation sa olympics kasi aminado ako na naging mahina mentality ko pagdating sa mga tao sa paligid ko na sobrang toxic.”
(El ambiente era tan tóxico y eso no era bueno. Cuando se trataba de las preparaciones para estos Juegos Olímpicos, admito que mi mentalidad se debilitó cuando se trataba de la gente a mi alrededor que era tan tóxica.)
A pesar de tener su mejor marca personal de 110kg, Sarno tuvo dificultades con su peso inicial de 100kg en arrancada ya que no pudo ejecutar un levantamiento adecuado en ninguno de sus tres intentos.
Sin especificar las razones o nombrar a las personas en la situación “tóxica” de la que habló, Sarno dijo que sentía que la gente a su alrededor estaba esperando que fracasara.
“No’ng papunta talaga sa training nung nawala na kami sa Manila, sobrang hirap kasi sobrang hina ng mentality ko na sobrang gusto ko na sumuko kasi sobrang toxic na ng environment na ando’n,” dijo Sarno.
“‘Di ko na kinakaya ‘yong mga tao na parang ramdam ko na ayaw nila na ando’n ko. Ramdam ko na gusto nilang ma-down ko.”
(Cuando nos fuimos de Manila para el entrenamiento, fue realmente difícil porque mi mentalidad era muy débil. Solo quería rendirme porque el ambiente se había vuelto tan tóxico. No podía soportar a esas personas que sentía que no querían que estuviera allí. Sentía que querían mi caída.)
La toxicidad del ambiente, dijo Sarno, jugó un papel importante en su bajo rendimiento en los Juegos Olímpicos de París.
“Kayang-kaya ko ‘yong 100, kahit nung nasa Manila kayang kaya ko sa training, sobrang nanghihnayang lang ako… nagpadala ako sa mga tao na nandodown sa’kin,” dijo Sarno.
(Podía hacer fácilmente 100, incluso cuando estaba en Manila podía hacerlos fácilmente en el entrenamiento. Tengo muchos arrepentimientos. Me dejé llevar por las personas que me estaban derribando.)
En un mensaje al Inquirer, el presidente de Samahang Weightlifting ng Pilipinas, Monico Puentevella, dijo que no sabía a qué se refería Sarno con “tóxico”.
“Por ahora, que su rendimiento hable por sí mismo. Es una joven, son sus primeros Juegos Olímpicos. Obtuvo el entrenador que quería. Estuvo fuera. Es una joven con un futuro brillante y no sé a qué se refiere con tóxico,” dijo Puentevella.
“Disfrutemos nuestra euforia por nuestras dos medallas de oro… Abordaré esto, confíen en mí. Arreglaré las cosas en dos semanas, cuando terminemos de celebrar. Por ahora, lo que hizo Caloy [Yulo] fue increíble y el país merece celebrarlo. “
Sigue la cobertura especial de Inquirer Sports de los Juegos Olímpicos de París 2024.