El ex futbolista del Barcelona Lionel Messi tuvo un muro en su mansión de Ibiza vandalizado por activistas del cambio climático el martes.
Dos miembros del grupo Futuro Vegetal se colaron en el terreno de la casa del internacional argentino y pintaron con pintura negra y roja en el muro.
Los activistas dijeron: “La propiedad es una construcción ilegal que el futbolista adquirió por la exorbitante cifra de 11 millones de euros.”
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MANSIÓN DE MESSI
No se sabe si el jugador y su familia estaban en la finca en el momento de la intrusión.
Messi compró la propiedad en 2022 cuando no contaba con un certificado final de obra del ayuntamiento de Sant Josep ni con un certificado de habitabilidad del ayuntamiento de Ibiza.
Las autoridades baleares estaban molestas porque el propietario anterior realizó trabajos de excavación no autorizados para construir un garaje.
A finales de mayo, Messi recibió una lista de requisitos para regularizar la propiedad y devolverla al estado que tenía antes.
El ayuntamiento de Sant Josep todavía está esperando obtener una respuesta después de que se pasara un “plazo”.
Las reformas previamente no autorizadas también implicaron una piscina.
“La ley no funciona igual para todos”, dijo Futuro Vegetal en un comunicado en redes sociales.
El ataque del grupo al muro de Messi es el último de una serie de actos en Ibiza.
El año pasado rociaron pintura negra en la discoteca Pacha y entraron en el lujoso club de playa Blue Marlin en Cala Jondal con pancartas de protesta con el lema: ‘Tu lujo, nuestra crisis climática’.
También arrojaron pintura en un jet privado, un Lamborghini y en un yate propiedad de Nancy Walton Laurie, heredera de la empresa de hipermercados Walmart de Estados Unidos.