Reuters
Marchand es ya el competidor francés más galardonado en unos Juegos
La sensación de la natación Léon Marchand parece haber inspirado un poco del ideal francés de “fraternité” que puede haberse sentido escaso en la nación anfitriona durante un tiempo de reciente división política aguda.
Una vez más fue aclamado por un público local en el relevo de 4 x 100m estilos del domingo, en el que él y sus compañeros ganaron el bronce después de liderar brevemente la competencia.
El joven de 22 años ha ganado cuatro oros en los Juegos, más que cualquier otro competidor francés en unos Juegos Olímpicos, y ha sido comparado con la leyenda estadounidense Michael Phelps.
Más fantástica es una idea lanzada por caricaturistas políticos y usuarios de redes sociales, que bromean diciendo que Marchand debería ser elegido primer ministro tras la elección anticipada amargamente disputada del mes pasado, en la que finalmente prevaleció una coalición de izquierda sobre la extrema derecha.
Las bromas muestran que Francia está buscando “elogiar a alguien que parece tan dedicado y sincero en su deporte y forma de vida”, explicó Andrew Hussey, historiador de la cultura francesa, quien agregó que muchos veían a Marchand como un contraste con los políticos del país.
Las heroicidades del atleta estaban demostrando ser una distracción bienvenida durante la crisis, dijeron parisinos descansando en la hierba en uno de los parques de la ciudad, viendo la acción deportiva en una pantalla grande.
“No queremos pensar en los problemas”, dijo una mujer llamada Thanh. “No queremos pensar en la división en el país”. El nadador había ayudado a “suavizarlo todo”.
Louis estuvo de acuerdo: “Cuando Marchand estaba compitiendo, fue lo más importante para el país por un tiempo”.
Thanh (izquierda, con su amiga Anne-Sophie y su hija Thanh) dijo que Marchand era una distracción bienvenida
La política parece estar en espera para los Juegos, después de que el presidente Emmanuel Macron dijo que las negociaciones sobre la formación de un nuevo gobierno tendrían que esperar hasta después de los Juegos Paralímpicos.
El Sr. Macron es uno de los que ha ido a animar a Marchand en persona. El viernes por la noche, el estadio estaba lleno de ensordecedores gritos de “allez” (“vamos”) cada vez que la gorra de natación del niño dorado se asomaba por encima del agua mientras se dirigía a la gloria en los 200m estilos.
Pero cualquiera que espere seriamente que Marchand se involucre en la política parece que quedará decepcionado.
El nadador, que entrena en Estados Unidos, ha evitado meterse en debates públicos. Eso contrasta con otro héroe nacional, la estrella del fútbol Kylian Mbappé, quien memorablente usó una rueda de prensa de la Euro 2024 para instar a votar en contra de la extrema derecha.
Getty Images
La australiana Cathy Freeman se convirtió en otro héroe local durante los Juegos de Sydney en 2000
La tradición de una población que se une en torno a un héroe es tan antigua como los propios Juegos, según Philip Barker, editor del Journal of Olympic History.
Algunos héroes deportivos de naciones anfitrionas han inspirado cambios duraderos, dijo Barker.
Citó a Cathy Freeman, una corredora aborigen que celebró su victoria en la carrera de 400m en Sydney en 2000 con las banderas australiana y aborigen, como la que provocó un espíritu de inclusividad de los australianos hacia la población indígena “que no había existido antes”.
Durante los Juegos de 2012 en Londres, Jessica Ennis-Hill, Greg Rutherford y Mo Farah fueron ensalzados después de lograr una rápida ráfaga de oros en lo que rápidamente se denominó “super Sábado”.
Pero la “era dorada” de solidaridad del Reino Unido fue bastante efímera, dijo Barker, señalando las divisiones políticas que caracterizaron los referendos sobre la independencia escocesa y el Brexit en los años siguientes.
Un especialista en política francesa contemporánea coincidió en que el efecto unificador de Marchand y sus compañeros medallistas franceses difícilmente durará mucho tiempo.
“Podemos esperar un regreso inmediato a un campo político fracturado y a un electorado descontento tan pronto como terminen los Juegos”, dijo Emile Chabal, profesor de historia contemporánea en la Universidad de Edimburgo.
“No importa cuánta Marchand-manía – y hemos visto esto antes con grandes estrellas deportivas francesas como [Zinedine] Zidane o Mbappé – detendrá eso”, dijo.
Getty Images
Los fanáticos que no pueden ver a Marchand en persona se han pegado a las pantallas en otros lugares de París
Pero durante la última semana, los compatriotas de Marchand han estado pegados a sus hazañas, tanto así que incluso aquellos que han pagado buen dinero por entradas olímpicas han pasado algunos de esos eventos viendo sus carreras en sus teléfonos.
Eso se aplicó a una parisina en el parque de fans, Audrey, quien admitió que había apartado la vista de un partido de voleibol para presenciar cómo Marchand reclamaba uno de sus oros en su pantalla.
Aunque Francia había encontrado un nuevo héroe, era posible que “quizás la próxima semana haya otro Marchand”, señaló Audrey. Y en cualquier caso, Marchand era solo una parte de algo más grande.
“No se trata solo de él”, dijo, citando la “increíble” ceremonia de apertura.
Francia debería estar “muy orgullosa de lo que estamos mostrando al mundo” con los Juegos Olímpicos, dijo.
Reuters is a global news organization.