“El jefe de la federación de fútbol de Argentina dijo que el caótico final de su partido de fútbol en los Juegos Olímpicos de París contra Marruecos el miércoles “no tiene sentido”, y el entrenador Javier Mascherano calificó la escena de “escándalo”.
El partido de apertura del torneo de fútbol masculino fue suspendido durante casi dos horas durante el tiempo añadido después de que los aficionados de Marruecos invadieron el campo y lanzaron botellas en protesta por un gol tardío de Argentina. El gol fue posteriormente anulado por el árbitro asistente de video, y Argentina perdió 2-1.
“Lo que sucedió en el campo fue un escándalo. Esto no es un torneo de barrio, son los Juegos Olímpicos”, dijo Mascherano.
Los organizadores de París dijeron que estaban tratando de “entender las causas e identificar acciones apropiadas” después del partido en Saint-Étienne. La federación de fútbol de Argentina dijo que presentó una protesta formal el miércoles ante la FIFA, el organismo rector mundial del fútbol, y hará “lo necesario” para garantizar la seguridad de los jugadores.
“Tener que esperar casi dos horas en el vestuario, después de que los aficionados de Marruecos entraran al campo, la violencia que sufrió la delegación de Argentina, nuestros jugadores teniendo que calentar de nuevo y continuar jugando un partido que debería haber sido suspendido por el árbitro principal, es realmente algo que no tiene sentido y que va en contra de las reglas de la competición”, dijo el presidente de la Asociación de Fútbol de Argentina, Claudio Tapia.
El equipo de Argentina también dijo que su base de entrenamiento fue robada antes del partido, con un reloj perteneciente al centrocampista Thiago Almada entre los objetos robados.
Mientras tanto, el presidente argentino Javier Milei llegó el jueves a París, según informó su oficina, y se espera que se reúna con el presidente francés Emmanuel Macron después de que las tensiones aumentaron entre sus países por los cánticos despectivos del equipo de fútbol argentino sobre los jugadores franceses en la Copa América.
Los aficionados de Marruecos invadieron el campo para protestar por el gol de Cristian Medina en el minuto 16 del tiempo añadido en el Stade Geoffroy-Guichard, que parecía empatar el partido a 2. También se lanzaron botellas desde la multitud y, en escenas frenéticas, la seguridad derribó a los aficionados en el campo.
“Algunos de los aficionados pensaron que era el final del partido y decidieron invadir el campo”, dijo Thomas Collomb, subdirector de seguridad de los organizadores de los Juegos Olímpicos de París. “La atmósfera era festiva. En ningún momento hubo riesgo de seguridad para los jugadores o espectadores. A los pocos minutos del pitido final, se formó una burbuja de seguridad alrededor de los atletas”.
Hubo imágenes de los jugadores de Argentina sobresaltándose cuando lo que parecía ser una bengala fue lanzada al campo.
“Puedo entender por qué esto podría haber sido preocupante para los atletas argentinos”, dijo Bruno Le Ray, director de seguridad del comité organizador. “El Stade Geoffroy-Guichard es conocido por no tener barreras entre las gradas y el campo. Hasta donde sabemos, no se lanzaron petardos en ningún momento. Definitivamente es un incidente, pero no en el sentido de seguridad”.
Achraf Hakimi, defensor de Marruecos, escribió en X: “Deploro la actitud de ciertos seguidores durante el partido, que empañó la imagen de nuestros fieles seguidores. Este tipo de comportamiento no tiene cabida en el fútbol.”
En medio de la confusión, se pensó que se había pitado el final del partido cuando los jugadores se dirigieron al vestuario y se les dijo a los aficionados que abandonaran el estadio. El sitio web oficial de la FIFA declaró el resultado final como 2-2.
Pero luego se supo que el partido había sido suspendido con solo unos minutos de juego restantes y que el gol de Medina estaba siendo revisado.
Los jugadores volvieron a calentar en un estadio vacío después de unas dos horas y el árbitro Glenn Nyberg confirmó que estaba revisando el video del gol en el monitor del banquillo. Luego confirmó que sería anulado por fuera de juego.
Marruecos se mantuvo firme para la victoria mientras los equipos disputaban los últimos tres minutos.
“El partido se suspendió por motivos de seguridad. En ningún momento nos hablaron sobre ninguna revisión (de la jugada)”, dijo Mascherano.
“Obviamente es confuso, pero tenemos que seguir adelante. Ya ha sucedido, ha terminado. Tenemos que concentrarnos en los dos partidos (restantes). Guardar la ira y dejarla salir en los próximos juegos.”
Argentina, dos veces campeona olímpica, era una de las favoritas previas al torneo y buscaba más trofeos después de ganar la Copa del Mundo en 2022 y dos Copas Américas consecutivas.
El sábado, Marruecos está programado para enfrentarse a Ucrania en el Stade Geoffroy-Guichard.
“Nos aseguraremos de reforzar la seguridad agregando barreras o seguridad privada”, dijo Le Ray.
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