El EXCESO de calor que actualmente está afectando a España puede ser una mala noticia para las personas con problemas cardíacos, especialmente para aquellos que hayan experimentado previamente insuficiencia cardíaca.
Los expertos creen que se deben tomar medidas preventivas en esta época del año y que se deben ignorar los medicamentos que se les hayan recetado.
El Dr. Ignacio Sánchez Lázaro, jefe de la Unidad de Cardiología del Hospital Vithas Valencia, dijo: “El calor extremo aumenta las posibilidades de sufrir problemas cardiológicos, especialmente aquellos que padecen insuficiencia cardíaca, que se debe principalmente a la vasodilatación y la hipertensión consecuente”.
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DR. IGNANCIO SÁNCHEZ LÁZARO
“El corazón tiene que bombear más sangre para mantener la presión arterial, lo que supone una gran carga para los músculos cardíacos y esta sobreexigencia puede desencadenar angina de pecho o insuficiencia cardíaca”.
“El calor excesivo fomenta la deshidratación y la pérdida de electrolitos, lo que puede alterar el ritmo cardíaco y causar arritmias”, añadió.
El Dr. Sánchez Lázaro advirtió sobre otros factores como la humedad que dificultan la evaporación del sudor, lo que a su vez impide que el cuerpo se enfríe adecuadamente.
“Esto aumenta la temperatura corporal y la frecuencia cardíaca, lo que puede provocar un golpe de calor o una descompensación cardíaca”, dijo el médico.
“El manejo cercano y el tratamiento de la insuficiencia cardíaca desde una unidad de cardiología son clave para reducir las hospitalizaciones y mejorar la calidad de vida de estos pacientes”.
“Es una patología crónica que implica un tratamiento multidisciplinario que debe coordinarse plenamente con otras especialidades e implicar educación sanitaria preventiva tanto para el paciente como para su entorno”, subrayó el Dr. Sánchez Lázaro.
En verano, las recomendaciones que deben seguir los pacientes con insuficiencia cardíaca son evitar salir durante las horas más calurosas, usar ropa ligera y transpirable, hidratarse bien (pero no en exceso en el caso de pacientes con insuficiencia cardíaca) y evitar bebidas alcohólicas, bebidas azucaradas o con cafeína, que pueden aumentar la pérdida de líquidos y alterar la frecuencia cardíaca.
“No deben olvidar hacer ejercicio moderado y seguir una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras, que aporte vitaminas, minerales y antioxidantes, así como evitar alimentos copiosos, grasos o picantes, que pueden aumentar la temperatura corporal y la presión arterial y controlar el consumo de sal, que favorece la retención de líquidos y la hipertensión”, concluyó el médico.