El Ministro de Turismo de ESPAÑA ha criticado a los manifestantes que rociaron a los visitantes de Barcelona con pistolas de agua el fin de semana pasado, diciendo que no representaban la cultura de hospitalidad del país.
Activistas que protestaban contra los efectos del turismo masivo en la capital catalana marcharon por el centro de la ciudad el sábado, coreando consignas como ‘turistas vayan a casa’.
Algunos rodearon restaurantes y un pequeño grupo de menos de una docena usó pistolas de agua contra aquellos que creían eran turistas extranjeros.
HABLA AQUÍ (imagen de La Moncloa)
Hablando el jueves, Jordi Hereu, quien fue alcalde anterior de Barcelona, dijo que las acciones de los manifestantes eran ‘reprochables’ y que el incidente fue exagerado por los medios internacionales.
Los activistas anti-turismo han realizado cada vez más protestas en Barcelona y ciudades como Palma y Málaga, afirmando que los turistas aumentan el costo de las propiedades, lo que significa que los locales no pueden permitirse vivir en los centros de las ciudades.
También ha habido manifestaciones masivas en las Islas Canarias.
Hereu dijo que el sector turístico necesita ser regulado y diversificado para hacerlo más sostenible.
“Redistribuir los beneficios del sector y mejorar la calidad de los empleos en el turismo ayudaría a aliviar las preocupaciones de los opositores”, agregó.
Indicó que la regulación podría implicar medidas como limitar o incluso eliminar los alquileres a corto plazo y poner un límite al número de habitaciones de hotel, pero que en gran medida depende de las autoridades locales y regionales.
El Ministerio de Turismo ha pronosticado que las llegadas internacionales mostrarán un aumento anual del 13% entre julio y septiembre en lo que será otro año de récord.