El primer ministro de España, Pedro Sánchez, ha instado a los miembros de la OTAN a aplicar la ley internacional de manera equitativa tanto en Ucrania como en Gaza, advirtiendo que los ‘dobles estándares’ serían contraproducentes y debilitarían el apoyo popular a Ucrania en su lucha contra Rusia.
Sánchez hizo estos comentarios en la cumbre de la OTAN en Washington D.C., a la que asistieron los 32 estados miembros de la alianza militar intergubernamental en celebración de su 75 aniversario este año.
La cumbre hasta ahora ha estado dominada por el debate sobre la aptitud mental del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, antes de las elecciones presidenciales de este año, después de una lamentable actuación en un debate televisado contra el candidato republicano presuntivo y ex presidente Donald Trump que llevó a importantes figuras de los Demócratas a discutir si el de 81 años debería ser removido como candidato del partido.
Sin embargo, representantes de cada estado miembro han estado ansiosos por utilizar la cumbre para presionar por un mayor apoyo militar y financiero para Ucrania, que también es la primera cumbre internacional importante a la que asiste Sir Keir Starmer, el nuevo primer ministro del Reino Unido que asumió el cargo después de que su Partido Laborista ganara una aplastante mayoría de 170 escaños en las elecciones generales de la semana pasada.
Al inicio de la cumbre de esta semana, el presidente Biden se comprometió a proporcionar a Ucrania cinco nuevos sistemas de defensa aérea estratégicos después de que un misil ruso destruyera un hospital infantil en la capital ucraniana, Kyiv, describiendo a la OTAN como ‘más poderosa que nunca’ e insistiendo en que ‘Ucrania prevalecerá’.
Por su parte, el primer ministro Pedro Sánchez utilizó la cumbre para rogar a sus pares que ‘presten atención al Sur Global’ y aseguren que la OTAN no pueda ser ‘acusada de dobles estándares que debilitarían nuestro apoyo a Ucrania’.
Mientras que la guerra en Ucrania fue mencionada más de 60 veces en el comunicado final de la cumbre de Washington, el conflicto en Oriente Medio no fue mencionado ni una vez.
Los comentarios de Sánchez llegaron después de que su gobierno tomara la decisión en mayo de reconocer formalmente a un estado palestino, lo que provocó la indignación de Israel, que afirmó que la medida apoyaba ‘el asesinato del pueblo judío y la promoción de crímenes de guerra’ y amenazó con cerrar el consulado español en Jerusalén como resultado.
Hablando en la cumbre, Sánchez dijo que ‘creemos en la necesidad de proporcionar un horizonte político para la gente en la región’, donde un estado palestino ‘pueda coexistir en paz y seguridad con sus vecinos, especialmente con Israel’.
Sánchez aprovechó la oportunidad para enfatizar su apoyo a Ucrania y a Volodymyr Zelensky. Crédito: Cordon Press
Sánchez dijo: “Por último, me gustaría insistir en la necesidad de prestar atención al sur. Y tenemos que hacerlo de manera coherente. Si exigimos que se respete la ley internacional en Ucrania, también debemos exigir que se respete en Gaza. Siempre hemos sostenido que nuestra fuerza radica en nuestra unidad. En un mundo globalizado, esa unidad debe ir de la mano de la coherencia. No podemos ser acusados de dobles estándares que debilitarían nuestro apoyo a Ucrania”.
Añadió: “Creo que sería muy importante que nuestros ciudadanos entendieran que lo que estamos defendiendo en Gaza y en Ucrania no es solo la ley internacional, sino que tenemos una posición política coherente, que no tenemos dobles estándares. Si le decimos a nuestra gente que apoyamos a Ucrania porque defendemos la ley internacional, esto es lo mismo que tenemos que hacer con Gaza y la guerra que estamos presenciando en Oriente Medio. Necesitamos mostrar que apoyamos la ley internacional, especialmente el derecho internacional humanitario”.
Sánchez también enfatizó su apoyo a Ucrania, describiendo la invasión del presidente Putin como ‘una guerra absolutamente injustificada’ y reiterando su solidaridad con Volodymyr Zelensky, el presidente de Ucrania.
“La cumbre de este año se lleva a cabo en un contexto internacional complejo, marcado por la persistencia de la agresión rusa en Ucrania, la guerra en Gaza y la inestabilidad en el flanco sur. Los países aliados deben enviar un mensaje fuerte de unidad y cohesión, fortaleciendo el vínculo transatlántico y trabajando por la paz”, añadió.