Los tampones vendidos bajo varias marcas populares pueden contener metales tóxicos como arsénico y plomo, según un estudio reciente de la Universidad de Berkeley en California.
El estudio, publicado en el último volumen de Environmental International, encontró que los 30 tampones probados de 14 marcas, incluyendo tampones orgánicos, contenían plomo, con algunos mostrando niveles preocupantes de otros metales tóxicos como arsénico.
“Seleccionamos varios productos diferentes y los probamos para un panel de 16 metales diferentes. Y encontramos concentraciones de cada uno de los metales que probamos. Para algunos de los metales, como el plomo, que es tóxico, encontramos su presencia en todos y cada uno de los tampones que probamos. Así que encontramos muchos metales”, dijo la autora principal Jenni Shearston, una estudiante de posgrado en la Escuela de Salud Pública de la UC Berkeley.
Pero a pesar del gran potencial de preocupación por la salud pública, dijo a Global News, se ha hecho muy poca investigación para medir los químicos en los tampones.
Los menstruadores pueden usar más de 7,400 tampones durante sus años reproductivos, con cada tampón retenido en la vagina durante varias horas, según el estudio. Típicamente están hechos de algodón, rayón o una mezcla de ambos materiales.
En Canadá, los tampones están regulados como dispositivos médicos por Health Canada. El sitio web del regulador de salud afirma que “se asegura de que los tampones vendidos en Canadá sean seguros, efectivos y de alta calidad según los requisitos para la licencia, la fabricación de calidad y la vigilancia postcomercialización”.
El estudio plantea preocupaciones de que esas regulaciones actuales pueden no ser suficientes.
Los tampones son de particular preocupación como una fuente potencial de exposición a químicos, incluidos metales, porque la piel de la vagina tiene un mayor potencial de absorción química que la piel en otras partes del cuerpo, según el estudio.
“A lot of the metals that they found, we naturally have in our body, our body naturally uses for various things,” explained Dr. Eboni January, a U.S.-based obstetrician-gynecologist.
“However, when it’s at toxic levels, that is of most concern to me. Lead was found in pretty much every tampon and lead is not safe at any level,” she told Global News.
Metals have been found to increase the risk of dementia, infertility, diabetes and cancer. They can damage the liver, kidneys, brain, and cardiovascular, nervous and endocrine systems.
“Arsenic is a known carcinogen, period,” January said. “It can cause lung cancer, skin cancer, bladder cancer and fertility issues.”