Una encuesta de CNN/Kaiser Family Foundation encontró recientemente que el 90% de los estadounidenses piensan que estamos en una crisis de salud mental. Las prácticas de salud conductual en todo el país están funcionando a toda velocidad con recursos que están siendo estirados al máximo, lo que significa que deben ser estratégicos y optimizar las operaciones tanto como sea posible. Dirigir una práctica de salud conductual requiere equilibrar el volumen de pacientes y la diversidad de casos, al tiempo que se mantienen las operaciones. Las políticas transparentes de la práctica son necesarias para el éxito y para garantizar una atención al paciente de alta calidad y consistente.
Aquí hay cuatro consideraciones para las prácticas de salud conductual para garantizar el éxito:
Proceso de admisión eficiente
Los proveedores tienen la oportunidad de causar una gran primera impresión durante el proceso de admisión del paciente, construyendo confianza y empatía. Se ha observado que los procesos de admisión digitales simplificados, por ejemplo, fáciles de seguir y completar para el paciente, mejoran la satisfacción del paciente y facilitan el trabajo de los administradores de la oficina. Además, a menudo traen consigo tiempos de espera reducidos y menos errores en la documentación.
Los formularios digitales y los sistemas automatizados pueden ayudar a simplificar los procesos de documentación al recopilar información del paciente antes de una primera visita. Los proveedores deben asegurarse de que los pacientes reciban toda la información necesaria antes de su cita, incluidas las indicaciones o instrucciones de telemedicina. Un sistema centralizado de programación de pacientes también puede ayudar a gestionar las citas de manera efectiva y reducir problemas como la sobreventa o las ausencias.
Implementación de telemedicina
No hay duda de que la industria de la salud ha sido transformada por la telemedicina, lo que facilita que los pacientes se conecten con los proveedores sin importar su ubicación. Esto es especialmente importante para la salud conductual, debido a la frecuencia con la que los pacientes a menudo ven a sus clínicos. Sin mencionar la creciente necesidad de servicios de salud mental en todo el país. Con sesiones regulares y consistentes siendo tan críticas para un tratamiento exitoso, la telemedicina puede ayudar a gestionar el volumen de pacientes y reducir la presión sobre la oficina física.
La telemedicina ofrece numerosos beneficios, incluida la reducción de las ausencias, la mayor flexibilidad de las citas y la mayor participación del paciente. Sin embargo, las prácticas deben seguir estrictas pautas de seguridad de los datos del paciente al ofrecer visitas de telemedicina. Las plataformas de telemedicina deben cumplir con las regulaciones de HIPAA, emplear comunicaciones encriptadas, inicios de sesión seguros y realizar auditorías de seguridad regulares. Un sistema EHR puede ayudar a mantener registros precisos de pacientes a lo largo de visitas en la oficina y virtuales, asegurando una atención al paciente eficiente.
Reclutamiento y retención de proveedores
Encontrar proveedores calificados es una prioridad número uno para las prácticas. Reclutar y retener clínicos que sean adecuados para la práctica y capaces de brindar una atención óptima al paciente es un problema crítico. Para hacer esto, las prácticas deben centrarse en ofrecer un entorno de trabajo de apoyo lleno de oportunidades de desarrollo profesional. La compensación competitiva también es un componente clave.
Además, implementar políticas que promuevan un equilibrio saludable entre el trabajo y la vida, ya sea mediante un horario flexible, iniciativas de bienestar o tiempo libre adicional, puede ayudar a reducir el agotamiento. Crear una cultura laboral positiva que fomente la lealtad puede ayudar a promover la satisfacción del proveedor, impactando la calidad de la atención al paciente y el éxito de la práctica.
Altos estándares de atención y cumplimiento
Mantener altos estándares de atención y cumplimiento con las regulaciones es crucial para cualquier práctica. Implementar políticas de aseguramiento de la calidad es importante para garantizar la seguridad del paciente y crear confianza. Crear una cadencia constante de monitoreo y evaluación de los procesos clínicos y los resultados es vital para lograr los mejores resultados de tratamiento.
Además, proteger los datos de los pacientes es muy importante y las prácticas siempre deben asegurarse de que sus sistemas cumplan con HIPAA y otras regulaciones mediante la realización de actualizaciones de seguridad regulares, educando al personal sobre la protección de datos y aplicando controles de acceso estrictos. Cumplir con estos altos estándares construye la confianza del paciente y protege la reputación de la práctica, contribuyendo en última instancia a su éxito a largo plazo.
En conclusión, la implementación de estas cuatro políticas de práctica, con la ayuda de las herramientas tecnológicas adecuadas, puede ayudar a las prácticas de salud conductual a tener éxito al mejorar la eficiencia operativa, la atención al paciente y los estándares de cumplimiento.