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El Ayuntamiento de Palma pondrá a disposición seis parcelas de terreno para la construcción de 363 viviendas de ‘precio limitado’.
El miércoles, el alcalde, Jaime Martínez, y el concejal de urbanismo, Óscar Fidalgo, presentaron la licitación para la construcción por parte de empresas que gestionarán las viviendas con una concesión máxima de 75 años; una vez finalicen las concesiones, pasarán a ser propiedad municipal.
Las parcelas se encuentran en Coll d’en Rabassa (donde hay dos), Camp Redó, Nou Llevant, Son Ferragut y Sa Indioteria.
Estas serán viviendas de uno a tres dormitorios, con una superficie de entre 45 y 70 metros cuadrados. Las medidas de emergencia del Gobierno Balear para la vivienda estipulan un precio de alquiler de entre 600 y 1.000 euros al mes, dependiendo del municipio y del nivel de eficiencia energética. Martínez sugirió que una vivienda de unos 80 metros cuadrados tendría un alquiler de entre 739 y 905 euros. “Será un 30% por debajo del precio medio de alquiler.”
Los futuros inquilinos deberán estar empadronados en Palma durante un mínimo de cinco años. Los residentes de fuera de Palma podrán presentar solicitudes y deberán demostrar siete años de empadronamiento en las Baleares. Se dará preferencia a grupos específicos, como personas con movilidad reducida, debido a sus mayores dificultades para acceder a una vivienda.
Un mínimo del 30 por ciento de las viviendas en cada parcela deberán ser para personas de hasta 35 años; un mínimo del 10 por ciento para mayores de 65 años; y otro mínimo del 10 por ciento para familias monoparentales.
Los licitadores tendrán 90 días para presentar sus ofertas. Una vez adjudicadas, tendrán seis meses para solicitar las licencias y nueve meses para comenzar la construcción, con un máximo de 24 meses para completarla.
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